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31 diciembre 2025

Dedican el templo de Los Pedraza en sus Bodas de Plata

El domingo 21 de diciembre, el obispo diocesano, Mons. Luis Urbanč, dedicó el templo puesto bajo el patrocinio de Nuestra Señora del Valle en Los Pedraza, departamento El Alto, en el marco de sus Bodas de Plata.

La ceremonia litúrgica fue concelebrada por el padre Carlos Rodríguez, párroco de la parroquia Inmaculada Concepción, a cuya jurisdicción pertenece la mencionada comunidad; y el padre Juan Ramón Cabrera, rector del Santuario Nuestra Señora del Valle y Catedral Basílica. 

Participaron autoridades de municipio local, concejales, miembros del Consejo de Pastoral y fieles en general.

En la oportunidad, se leyó una reseña de este lugar de oración desde sus inicios y a lo largo de estos 25 años de fe, compromiso y encuentro en comunidad.

También se realizó el descubrimiento de placas recordatorias destacando el valor espiritual y el profundo significado que esta capilla tiene para la comunidad.

Durante la celebración eucarística, el Obispo bendijo el agua con la cual roció el templo y al pueblo.

Después de la homilía, se rezaron las Letanías, tras lo cual, el Obispo pronunció la plegaria de Dedicación del Templo y ungió con el Santo Crisma las cruces adosadas a los muros del templo, para manifestar que éste es el lugar privilegiado donde se renueva el Misterio Pascual del Señor. A continuación, procedió a la incensación del recinto sagrado. 

Una vez pronunciada la bendición final, los presentes firmaron el acta que registra este feliz acontecimiento.

Recordamos que el templo fue inaugurado en el año 2000 y la consagración de su altar se realizó en el año 2010.

La fiesta finalizó con el desfile de gauchos, un almuerzo comunitario y la actuación de academias, grupos y solistas de la zona.

Fotos: facebook Prensa Iglesia Catamarca / @DiocesisCat

29 diciembre 2025

Reliquia del Beato Esquiú llega a la parroquia San Roque de Recreo

El domingo 28 de diciembre, durante la celebración de la Santa Misa, presidida por el párroco, padre Humberto Carrizo, la comunidad parroquial de San Roque, en Recreo, departamento La Paz, recibió con alegría y devoción una reliquia de primer grado del Beato Mamerto Esquiú, que quedó expuesta para su veneración.

Se trata de un fragmento de las reliquias que fueron donadas en el año 2018 por el entonces Arzobispo de Córdoba, Mons, Carlos José Ñáñez, a la Diócesis de Catamarca por pedido del Obispo catamarqueño Mons. Luis Urbanč. Estas reliquias que llegaron desde Córdoba a Catamarca consisten en una falange y vértebra extraídas de los restos del Beato Esquiú que descansan en la Catedral de Córdoba, las cuales fueron acompañadas de un certificado de autenticidad rubricado por Mons. Carlos José Ñáñez y el Notario Mayor Mons. Marcelo Gustavo Renardi.

Estas reliquias fueron trasladadas desde la ciudad mediterránea a la capital catamarqueña, el 4 de octubre de 2018, y entronizadas en un altar lateral de la Catedral Basílica y Santuario de la Virgen del Valle.

Fotos: facebook Prensa Iglesia Catamarca / @DiocesisCat

Recuerdan la partida del Beato Esquiú desde Recreo a La Rioja

El entonces Obispo de Córdoba, Fray Mamerto Esquiú, había llegado a Recreo en tren desde la ciudad mediterránea, el jueves 28 de diciembre, y aquí pasó la noche.

Al día siguiente, viernes 29 de diciembre de 1882, desde la estación Recreo, acompañado de su secretario, el presbítero Pedro Anglada, a las 7.00, tomó la mensajería para emprender viaje hacia La Rioja.

Recreo pertenece a la provincia de Catamarca, y por eso el Obispo Esquiú, mientras cruzaba la región, no llevó el pectoral. “No tengo jurisdicción aquí, aunque es mi país natal”, le dijo a su secretario.

En las postas y donde veía personas al paso de su carruaje, repartía libros de instrucción religiosa, el Catecismo de Mazo y Rosarios de Astete, sugiriendo que “los lean con atención y aprovechen sus enseñanzas”.

A medida que la mensajería avanzaba por la polvorienta huella de tierra, los pobladores salían a saludarlo y pedían por la lluvia. El "Santo Padre Esquiú" escuchó el pedido, se internó en el agreste bosque y arrodillado con los brazos en cruz, pidió al Altísimo por la lluvia. Ésta no se hizo esperar y llovió después de varios meses de sequía.

La mensajería era una galera tirada por dos yuntas de caballo, a veces tres, que llevaba el correo, encomiendas y pasajeros, uniendo la estación de trenes El Recreo, con la capital de La Rioja.

El Obispo de Córdoba, Mamerto de la Ascensión Esquiú, partió desde Recreo, pasó por El Barrial, El Suncho, San Miguel, La Horqueta, la Vieja Posta de La Guardia hasta llegar a Casa de Piedra, en el extremo sur del Cerro Ancasti, todos parajes del departamento La Paz.

Desde Casa de Piedra, siguieron viaje rumbo a La Rioja. Era diciembre y hacía mucho calor. El viaje duraba tres días.

Aporte: Prof. Roque Morales

Imágenes: facebook Prensa Iglesia Catamarca / @DiocesisCat

Fiestas en honor de Nuestra Señora de Belén y el Santo Cristo de los Milagros

Bajo el lema “Con María de Belén, caminamos en esperanza”, desde el 20 de diciembre se viene desarrollando las Fiestas en honor de Nuestra Señora de Belén y del Santo Cristo de los Milagros, que se extenderán hasta el 6 de enero de 2026.

PROGRAMA

Lunes 29 de diciembre

19:00 Exposición del Santísimo. Rezo del Santo Rosario. Letanías. Novena de la Virgen.

20:00 Santa Misa. Intenciones de las comunidades de Ciénaga de Arriba, Ciénaga de Abajo, Capilla San Isidro Labrador (La Puntilla), Oratorios de San Pantaleón y Cristo Pobre; Hogar de Ancianos y Hospital Zonal Belén; Sanatorio Francés, Sanatorio Calchaquí, Grupo Morena, Palestra y Coros de la parroquia.

Martes 30 de diciembre

19:00 Exposición del Santísimo. Rezo del Santo Rosario. Letanías. Novena de la Virgen.

20:00 Santa Misa. Intenciones de las comunidades de Piedra Larga, La Aguada, Las Arcas. Las Vallas, Capillas Nuestra Señora del Carmen, Justo Juez. Movimiento Familiar Cristiano, Apostolado de la Oración, Dirección de Tránsito, Bomberos Voluntarios, Defensa Civil y Registro Civil.

Miércoles 31 de diciembre

19:00 Exposición del Santísimo. Rezo del Santo Rosario. Letanías. Novena de la Virgen.

20:00 Santa Misa. Intenciones de las comunidades de La Toma, Pozo de Piedra, Capillas San Cayetano y San Roque (Artaza), Oratorios Virgen de Guadalupe, San José, Secretaría y personal de limpieza del Santuario y Equipo de Liturgia.

Jueves 1 de enero

Solemnidad de Santa María Madre de Dios

19:00 Exposición del Santísimo. Rezo del Santo Rosario. Letanías. Novena de la Virgen.

20:00 Santa Misa. Intenciones de las comunidades de Las Juntas, Las Barrancas, Capillas Virgen de Andacollo, San Antonio, Consejo Pastoral Económico y Consejo de Pastoral Parroquial.

Viernes 2 de enero

19:00 Exposición del Santísimo. Rezo del Santo Rosario. Letanías. Novena de la Virgen.

20:00 Santa Misa. Intenciones de las comunidades de Cóndor Huasi, Las Estancias, Capillas Señor del Milagro, Nuestra Señora del Valle (El Molino), Cáritas Parroquial, Municipalidad, Concejo Deliberante y Medios de Comunicación.

Sábado 3 de enero

19:00 Exposición del Santísimo. Rezo del Santo Rosario. Letanías. Novena de la Virgen.

20:00 Santa Misa. Bautismos. Intenciones de las comunidades de Puerta de San José, Ampujaco, Grupo Juvenil, Grupo Mama Antula y Academia de Danzas de la Ciudad de Belén.

21:00 Homenaje de Academias de Danzas a Nuestra Madre de Belén.

Domingo 4 de enero

Día litúrgico de Nuestra Señora de Belén

8:00 Inicio de Cabalgata de las Agrupaciones Gauchas por los diferentes barrios de la ciudad de Belén llevando la Imagen peregrina de la Santa Patrona.

19:00 Exposición del Santísimo. Rezo del Santo Rosario. Letanías. Novena de la Virgen.

20:00 Santa Misa. Intenciones de las comunidades de Londres: San Ramón, San Juan Bautista, Inmaculada Concepción, San José (Shincal), Cristo de los Pobres (La Aguada), El Breal, Catequesis Parroquial, Ministros de la Comunión, Municipalidad de Londres, Agrupaciones Gauchas y Arañitas hilanderas.

21.00 Homenaje a la Virgen en el Barrio 250 Viviendas.

Lunes 5 de enero

19:00 Exposición del Santísimo. Rezo del Santo Rosario. Letanías. Novena de la Virgen.

20:00 Santa Misa. Intenciones de las comunidades del Decanato Oeste: parroquias Nuestra Señora de Fátima, San Juan Bautista, Nuestra Señora del Rosario, San Francisco de Asís, Nuestra Señora de la Candelaria y Nuestra Señora de Belén, Dirección de Cultura, Turismo y Protocolo y Dirección de Educación y Artesanías.

21:00 Pesebre Viviente y Festival de la Canción Juvenil a la Virgen.

Sábado 6 de enero

Solemnidad de la Epifanía del Señor y Fiesta de Nuestra Señora de Belén

5:00 Peregrinación del Norte Chico y del Norte Grande, desde la Puerta de San José hasta el Santuario.

9:00 Misa de los peregrinos

19:00 Inicio de la previa.

19:30 Encuentro de María con sus hijos. Traslado de las sagradas imágenes a la rotonda del barrio Presbítero Manuel A. Acevedo. Recorrido: Calle Lavalle, avenidas Mitre, Calchaquí y Naco Rueda (Circunvalación).

20:00 Santa Misa en la rotonda de la Coronación. Se reza por las intenciones de todo el Pueblo de Dios que peregrina en Belén, por las Autoridades Civiles, Militares y de Seguridad, Bomberos Voluntarios y Defensa Civil, instituciones de la comunidad, artesanos, agricultores. Mundo de la Cultura y el Deporte.

21:00 Inicio de la Solemne Procesión hacia el Santuario. Recorrido: Av. Virgen de Belén, calles Gral. Belgrano y Gral. Lavalle hasta el Santuario.

En el atrio: Palabras de culminación de las festividades, Himno Nacional Argentino, Himno a Catamarca, Himno a Belén. Bendición final. Retorno de la Virgen de Belén a su camarín.

Se pide a los vecinos que tienen su domicilio sobre estas calles dejar libre el paso de vehículos a partir de las 18:00 para facilitar el desplazamiento de las imágenes sagradas y peregrinos.

Se recuerda que para participar con fe y devoción en estas festividades es importante acercarse a los sacramentos de la Confesión y de la Eucaristía.

 Foto: facebook Prensa Iglesia Catamarca / @DiocesisCat

28 diciembre 2025

La Iglesia Diocesana de Catamarca celebró con gozo y gratitud la Clausura del Año Jubilar 2025

El Obispo rogó “que nuestros hogares sean faros de esperanza”, que podamos “sostener los propósitos de cambio del Año Jubilar”, y llamó “a preparar nuestros corazones para vivir el Año Jubilar por el Bicentenario del Nacimiento del Beato Mamerto Esquiú”.

 

En un clima de mucha alegría, durante la mañana de este domingo 28 de diciembre, Fiesta de la Sagrada Familia de Jesús, María y José, la Iglesia Diocesana de Catamarca celebró la clausura solemne del Año Jubilar 2025, convocado por el Papa Francisco hace un año, con el lema “Peregrinos de esperanza”.

La Santa Misa fue presidida por el obispo diocesano, Mons. Luis Urbanč, y concelebrada por el vicario general, P. Julio Murúa; el rector de la Catedral Basílica y Santuario de Nuestra Señora del Valle, P. Juan Ramón Cabrera; y numerosos sacerdotes de los decanatos que conforman la Diócesis de Catamarca.

Una gran cantidad de fieles laicos y religiosas, provenientes de las distintas comunidades, se dio cita en la Iglesia Catedral, madre de todas las iglesias de la diócesis, para celebrar con alegría esta jornada especial.

La ceremonia litúrgica dio inicio con el ingreso de la Cruz en procesión desde el atrio del templo hasta el Presbiterio, donde estuvo expuesta durante todo el año cerca del altar, y que en este día estuvo adornada con flores, para destacar la centralidad que tuvo durante todo el Año Jubilar. Detrás de los ministros ingresaron los fieles y peregrinos que atravesaron la Puerta Santa, para ganar la indulgencia plenaria concedida por la Iglesia en este Año Santo.

Luego de la proclamación de la Palabra de Dios, el Obispo pronunció su homilía, en la que inicialmente dijo que “esta celebración nos une a todas las Diócesis del mundo para dar por finalizado el Año Jubilar que hemos vivido desde el 29 de diciembre del año pasado, también Fiesta de la Sagrada Familia”.

Luego manifestó que “el Papa Francisco, en la bula de convocatoria «La Esperanza no defrauda», nos comprometía a una conversión personal y comunitaria profunda, centrada en el perdón, único camino para la reconciliación y la recomposición de las historias, rompiendo con la prisa del mundo moderno, para mirar a largo plazo, y enfocándonos en la esperanza frente a la adversidad, la paz, el cuidado de la creación, la apertura generosa y responsable de la vida, y la solidaridad con los más necesitados (pobres, enfermos, migrantes), viviendo la fe como camino de peregrinación hacia Dios”.

Al respecto invitó a preguntarse “qué hicimos, cuánto cambiamos en nuestro modo de vivir, cómo queremos seguir peregrinando y, sobre todo, si hemos tomado conciencia y nos hemos convencido de que Jesucristo es el Señor de la Vida y de la historia, único fundamento de una esperanza cierta, que nos sitúa en el más allá de la precariedad y volatilidad de la vida terrena, que se nos dio como ‘don y tarea’, pero no como morada definitiva”.

Al referirse a la celebración de la Sagrada Familia, señaló que “la tradición litúrgica reserva este primer domingo después de Navidad a la Sagrada Familia de Nazaret”, resaltando que “el tiempo de Nazaret es un tiempo de silencio, con una carga muy peculiar de intimidad profunda. Es ahí donde Jesús madura como hombre, su personalidad psicológica se cincela en las tradiciones de su pueblo, y allí irá internalizando el proyecto que un día consumará. Nazaret, hoy y siempre, será una sorpresa, porque es una llamada eterna a escuchar la voz de Dios y a responder como lo hicieron José y María, y así se lo enseñaron a Jesús… El Hijo de Dios que vino a salvarnos, tuvo en Nazaret una familia como nosotros, y que la Providencia Divina nos la deja como Modelo a seguir”.

“La Liturgia de este domingo nos deja bien en claro que la Familia Cristiana debe ser un reflejo del Amor Divino, ya que fue creada para ser la primera escuela de las virtudes sociales que la humanidad necesita”, afirmó.

 

“La familia es el primer lugar donde aprendemos quién es Dios”

Luego desarrolló puntos vinculados con la familia, indicando que “la familia cristiana no es simplemente una unidad social o biológica; es una realidad espiritual. A menudo se la llama la ‘Iglesia doméstica’ porque es en el hogar donde la fe se vive, se transmite y se pone a prueba diariamente. Es el primer lugar donde aprendemos quién es Dios, no a través de grandes teologías, sino a través del amor de nuestros padres, el perdón entre hermanos y la oración compartida”.

“En un mundo tan dominado por el individualismo -continuó-, la familia cristiana se erige como un testimonio de comunidad. Nos recuerda que hemos sido creados para la relación, reflejando la naturaleza misma de Dios, que es comunión: Padre, Hijo y Espíritu Santo”.

En otro de los ítems señaló que “el apóstol Pablo nos ofrece una visión radical de la familia. No se basa en el dominio, sino en el servicio mutuo: El matrimonio es comparado con la relación entre Cristo y la Iglesia. Implica un amor sacrificial, donde cada uno busca el bien del otro por encima del propio. La educación no se trata de imponer reglas arbitrarias, sino de formar a los hijos con la ‘disciplina e instrucción del Señor’, comprendiendo sus corazones y guiándolos con paciencia”.

Asimismo, planteó los desafíos en el mundo moderno, afirmando que “hoy en día, la familia cristiana navega por aguas turbulentas. El ritmo frenético de la vida, la intrusión de la tecnología en la mesa familiar y la relatividad de los valores morales presentan desafíos constantes. Sin embargo, es precisamente en esta oscuridad donde la luz de la familia cristiana brilla más. Cuando una familia decide perdonarse en lugar de guardar rencor, comer juntos y conversar en lugar de aislarse en pantallas, orar juntos en medio de la dificultad, servir al vecino necesitado, están realizando un acto contracultural de fe. Están declarando que el amor de Dios es más fuerte que las tendencias del mundo”.

 

Pilares para fortalecer el hogar

Por último, destacó que “para que una familia se mantenga firme, necesita cultivar ciertos hábitos espirituales”, como “la oración conjunta, ya bendiciendo los alimentos, ya leyendo la Biblia antes de dormir o en otros momentos, ya participando juntos de la Misa dominical. Jesús ha prometido estar en medio de los que se reúnen en su nombre a orar. Hagan que Él sea el centro del hogar. *El perdón rápido” ya que “en la convivencia diaria, las ofensas son inevitables. Como familia cristiana sean constantes en el perdón mutuo, así recordarán cuánto nos ha perdonado Dios a nosotros. La hospitalidad: Un hogar cristiano no debe tener las puertas cerradas. Debe ser un lugar de refugio, alegría y acogida para amigos, familiares y necesitados”.

“La familia cristiana no es una familia perfecta; es una familia en proceso de redención. Es un grupo de personas imperfectas que confían en un Dios perfecto. Su misión es simple pero profunda: hacer visible el amor invisible de Dios y preparar a las futuras generaciones para caminar en la verdad, en el amor y en la luz”, enfatizó.

Hacia el final de su predicación rogó a Nuestra Madre del Valle “que nuestros hogares sean faros de esperanza, donde cualquiera que entre pueda decir: ‘Aquí se respira el amor de Dios, aquí vive Dios, aquí hay paz’”.  

Además, le pidió “que nos ayudes a sostener los propósitos de cambio que nos hemos hecho a lo largo del Año Jubilar. Que, de verdad, podamos cumplir con Jesús, y así hacer presente el Reino de Dios”. Y también “a preparar nuestros corazones para vivir el Año Jubilar por el Bicentenario del Nacimiento de nuestro querido beato y comprovinciano, Mamerto Esquiú, obispo”.

 

Comunión y acción de gracias

En el momento de la preparación de la mesa eucarística, se presentaron los dones del pan y el vino, que luego se convirtieron en el Cuerpo y Sangre de Nuestro Señor Jesucristo.

Al tratarse de un día especial, la Comunión se distribuyó bajo las dos especies, ya que «en esa forma es donde más perfectamente se manifiesta el signo del banquete eucarístico» (Ordenación General del Misal Romano, 281).

Después de la Comunión, el Obispo invitó a los fieles a bendecir al Señor por la gracia del Año Jubilar y la indulgencia, entonando un canto de acción de gracias.

La celebración eucarística terminó con la bendición solemne invocando sobre el pueblo la fuerza de la ayuda divina para que, una vez terminada la vivencia del Jubileo, la comunidad que ha experimentado el perdón pueda volver a la vida diaria, renovada por la gracia de un tiempo especial de oración y de cercanía al Señor.

 

Gesto de caridad y confraternidad

Los alimentos no perecederos ofrecidos por los fieles como gesto de caridad, que continúa incluso después de la clausura del Año Jubilar, serán destinados a la Comunidad Cenáculo, donde se recuperan los jóvenes con problemas de adicciones. Se agradece a quienes colaboraron.

Al concluir la celebración eucarística, el Obispo invitó a los presentes a compartir un desayuno a la canasta en el Paseo de la Fe, como un lindo espacio para confraternizar, dialogar e intercambiar experiencias de fe.

 

TEXTO COMPLETO DE LA HOMILÍA

Queridos hermanos:

Bienvenidos a esta celebración que nos une a todas las Diócesis del mundo para dar por finalizado el Año Jubilar que hemos vivido desde el 29 de diciembre del año pasado, también Fiesta de la Sagrada Familia.

El recordado, y no bien valorado, Papa Francisco, en la bula de convocatoria «La Esperanza no defrauda», nos comprometía a una conversión personal y comunitaria profunda, centrada en el perdón, único camino para la reconciliación y la recomposición de las historias, rompiendo con la prisa del mundo moderno, para mirar a largo plazo, y enfocándonos en la esperanza frente a la adversidad, la paz, el cuidado de la creación, la apertura generosa y responsable de la vida, y la solidaridad con los más necesitados (pobres, enfermos, migrantes), viviendo la fe como camino de peregrinación hacia Dios.

Hoy nos tenemos que preguntar qué hicimos, cuánto cambiamos en nuestro modo de vivir, cómo queremos seguir peregrinando y, sobre todo, si hemos tomado conciencia y nos hemos convencido de que Jesucristo es el Señor de la Vida y de la historia, único fundamento de una esperanza cierta, que nos sitúa en el más allá de la precariedad y volatilidad de la vida terrena, que se nos dio como ‘don y tarea’, pero no como morada definitiva.

La tradición litúrgica reserva este primer domingo después de Navidad a la Sagrada Familia de Nazaret. El tiempo de Nazaret es un tiempo de silencio, con una carga muy peculiar de intimidad profunda. Es ahí donde Jesús madura como hombre, su personalidad psicológica se cincela en las tradiciones de su pueblo, y allí irá internalizando el proyecto que un día consumará. Nazaret, hoy y siempre, será una sorpresa, porque es una llamada eterna a escuchar la voz de Dios y a responder como lo hicieron José y María, y así se lo enseñaron a Jesús. Ellos le hablaron de Dios y le enseñaron a ir a la sinagoga, a leer la Escritura, en particular los profetas por los que quedaría fascinado y a orar con los salmos. El Hijo de Dios que vino a salvarnos, tuvo en Nazaret una familia como nosotros, y que la Providencia Divina nos la deja como Modelo a seguir.

La Liturgia de este domingo nos deja bien en claro que la Familia Cristiana debe ser un reflejo del Amor Divino, ya que fue creada para ser la primera escuela de las virtudes sociales que la humanidad necesita.

La primera lectura, tomada del Eclesiástico (3,2-6.12-14), afirma que es un tesoro tener un padre y una madre, porque sin padre y sin madre no se puede existir. Dios es representando plenamente en la conjunción padre-madre. Por eso Dios, a pesar de que lo confesamos como Omnipotente y Poderoso, dispuso que su Hijo se encarnase, se acercase a nosotros siendo hijo de una madre y que tuviera un padre. La familia está formada por unos padres y unos hijos y nadie está en el mundo sin ese proceso. No tenemos otra manera de venir al mundo, de crecer, de madurar, y ello forma parte del misterio de la creación de Dios. Por eso el misterio de ser padres no puede quedar reducido solamente a lo biológico. Eso es lo más fácil, y, no pocas veces irracional y mundano. Ser padres, porque se tienen hijos, es un misterio de vida que los creyentes sabemos, está en las manos de Dios.

1. La Familia como "Iglesia Doméstica"

La familia cristiana no es simplemente una unidad social o biológica; es una realidad espiritual. A menudo se la llama la "Iglesia doméstica" porque es en el hogar donde la fe se vive, se transmite y se pone a prueba diariamente. Es el primer lugar donde aprendemos quién es Dios, no a través de grandes teologías, sino a través del amor de nuestros padres, el perdón entre hermanos y la oración compartida.

En un mundo tan dominado por el individualismo, la familia cristiana se erige como un testimonio de comunidad. Nos recuerda que hemos sido creados para la relación, reflejando la naturaleza misma de Dios, que es comunión: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

2. El Fundamento del Amor: Efesios y Colosenses

El apóstol Pablo nos ofrece una visión radical de la familia. No se basa en el dominio, sino en el servicio mutuo:

• El matrimonio: Es comparado con la relación entre Cristo y la Iglesia. Implica un amor sacrificial, donde cada uno busca el bien del otro por encima del propio.

• La educación: No se trata de imponer reglas arbitrarias, sino de formar a los hijos con la "disciplina e instrucción del Señor", comprendiendo sus corazones y guiándolos con paciencia.

3. Desafíos en el Mundo Moderno

Hoy en día, la familia cristiana navega por aguas turbulentas. El ritmo frenético de la vida, la intrusión de la tecnología en la mesa familiar y la relatividad de los valores morales presentan desafíos constantes. Sin embargo, es precisamente en esta oscuridad donde la luz de la familia cristiana brilla más. Cuando una familia decide:

• Perdonarse en lugar de guardar rencor.

• Comer juntos y conversar en lugar de aislarse en pantallas.

• Orar juntos en medio de la dificultad.

• Servir al vecino necesitado.

…están realizando un acto contracultural de fe. Están declarando que el amor de Dios es más fuerte que las tendencias del mundo.

4. Pilares para Fortalecer el Hogar

Para que una familia se mantenga firme, necesita cultivar ciertos hábitos espirituales:

1. La Oración Conjunta: Ya bendiciendo los alimentos, ya leyendo la Biblia antes de dormir o en otros momentos, ya participando juntos de la Misa dominical. Jesús ha prometido estar en medio de los que se reúnen en su nombre a orar. Hagan que Él sea el centro del hogar.

2. El Perdón Rápido: En la convivencia diaria, las ofensas son inevitables. Como familia cristiana sean constantes en el perdón mutuo, así recordarán cuánto nos ha perdonado Dios a nosotros.

3. La Hospitalidad: Un hogar cristiano no debe tener las puertas cerradas. Debe ser un lugar de refugio, alegría y acogida para amigos, familiares y necesitados.

En fin, La familia cristiana no es una familia perfecta; es una familia en proceso de redención. Es un grupo de personas imperfectas que confían en un Dios perfecto. Su misión es simple pero profunda: hacer visible el amor invisible de Dios y preparar a las futuras generaciones para caminar en la verdad, en el amor y en la luz.

Por eso, te pedimos Madre del Valle, que nuestros hogares sean faros de esperanza, donde cualquiera que entre pueda decir: "Aquí se respira el amor de Dios, aquí vive Dios, aquí hay paz".

Además, te pido que nos ayudes a sostener los propósitos de cambio que nos hemos hecho a lo largo del Año Jubilar. Que, de verdad, podamos cumplir con Jesús, y así hacer presente el Reino de Dios.

Por último, ayúdanos Madre a preparar nuestros corazones para vivir el año jubilar por el Bicentenario del nacimiento de nuestro querido beato y comprovinciano, Mamerto Esquiú, obispo. Así sea.

#CierreJubileo2025Catamarca

Fotos y video: facebook Prensa Iglesia Catamarca / @DiocesisCat