El Santuario de la Gruta de la Virgen del Valle celebra la Fiesta de la Protección de Nuestra Madre del Valle, a 20 años del sismo, y el 3° Aniversario de la Beatificación de Fray Mamerto Esquiú, con la presencia de la Cadena del Milagro y una serie de actividades.
El martes 3 de septiembre, se
realizó la entronización de la imagen de la Virgen Morena en el altar de la
Gruta y fue recibida la Cadena del Milagro.
La Santa Misa fue presidida por
el rector del Santuario, padre Santiago Granillo, con la participación de integrantes
del área comercial de la Gruta, miembros de las comisarías 8° y 13°, Servidores
del Santuario, peregrinos y devotos de la Virgen.
Al referirse a la presencia de
la Cadena del Milagro, el padre Granillo dijo que “la Fiesta de la Virgen del
Valle en septiembre no es sólo por un acontecimiento sino por todas las
bendiciones que recibimos de Ella como Madre y como intercesora, es la Fiesta
de la gratitud”.
Y le pidió a la Madre del
Valle “que nos permita vivir estos días con este signo de protección que
también fue el paso de Dios y de la Virgen por la vida de un extranjero, de un
peruano, que como cuentan los datos históricos, padecía de una parálisis y por
haber escuchado de las maravillas de la Virgen se vino a Catamarca a implorar
esta gracia y la Madre Morena, le dio la bendición de volver a caminar. Dejó
como regalo, o como pago, en primer momento la cadena de oro. El hombre,
confundido, contó que la Virgen lo había sanado por el pago de la cadena de
oro. Vuelve a enfermarse y se da cuenta que la Virgen le devolvió la cadena
porque Ella no canjea ni hace trueque por sus bendiciones, las otorga porque es
madre, ama y tiene el poder de alcanzar toda bendición de parte de su Hijo
Jesucristo”.
“La cadena fue un signo de
gratitud a la Virgen, y la Providencia ha querido que a lo largo del tiempo sea
un signo patente y elocuente de su protección. En aquel momento por un hijo,
ahora es por muchos”, expresó.
Al finalizar la celebración,
los fieles presentes recibieron la bendición con la cadena y luego pudieron
tomar gracia, en forma personal.
La Cadena del Milagro de la Virgen permanecerá en el subsuelo del Santuario hasta este sábado 7.
Descripción
de manto
La imagen de la Virgen que fue
entronizada en la Gruta luce un manto confeccionado en el Taller de María.
Según la descripción, en el
vestido se ha bordado las manos gigantes de la Virgen y el mapa de la República
Argentina, representando su protección a todos sus hijos que vienen a visitarla
durante todo el año; muchos a dar gracias, otros a suplicar salud por su
intercesión, y otros sólo a visitarla. También se bordaron dos rosas de color
lila y naranja y tulipanes.
La rosa lila representa
sabiduría, creatividad, imaginación, calma, tranquilidad; eso es lo que brinda
la Madre divina a sus hijos. Esta flor fue realizada con pequeñas piedras una
por una y un cristal mostrando con ello que cada hijo está en cada piedra
engarzado en su divino corazón.
La rosa naranja transmite
alegría, cuántos regresan felices, otros con un milagro de salud concedido por
su intercesión maternal.
El tulipán es una alegoría del
amor con que Ella los recibe, las emociones y lágrimas que muchos expresan al
verla, la pasión que ponen para cumplir una promesa y la admiración de su
belleza celestial.
Ella se viste de gala y
hermosas prendas para esperar esplendorosa a sus hijos.
Eso fue lo que su Hijo Jesús al
pie de la cruz nos regaló: "Hijo, ahí tienes a tu madre; madre, ahí tienes
a tu hijo", y Juan la llevo a su casa.
El manto está bordado de hojas
y rosas en piedras doradas y strass que representa el año dedicado a la oración.
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