El miércoles 19 de marzo, la comunidad parroquial de San José en Piedra Blanca, departamento Fray Mamerto Esquiú, celebró a su santo patrono.
La procesión con la sagrada imagen
se realizó desde el sector denominado Callejón Hondo sobre ruta provincial N°
41 hasta el templo parroquial, en cuyo atrio se celebró la Santa Misa,
presidida por el párroco, padre Carlos Robledo.
Participaron autoridades
municipales encabezadas por la intendenta de Fray Mamerto Esquiú, Prof.
Alejandra Benavídez; el senador departamental, Dr. Guillermo Ferreyra, y fieles
de las comunidades que conforman la jurisdicción parroquial.
En su homilía, el padre Robledo
manifestó: “Con esta celebración litúrgica estamos concluyendo como comunidad
parroquial estos días de fiesta en torno a la figura del glorioso patriarca San
José, patrono de la Iglesia y, como decíamos estos días de la novena, tenemos
el privilegio y el honor de tenerlo como el guardián, el custodio de nuestra
parroquia, nada más y nada menos que al esposo de María, aquel hombre a quien Dios
escogió para ser el padre en la tierra de su Hijo Único, de la segunda Persona
de la Santísima Trinidad”.
Luego mencionó el Año Jubilar que
estamos transitando, afirmando que “como parroquia hemos recibido la gracia de que
este templo de San José sea uno de los diseminados por todo el mundo como
templo de la misericordia, como un lugar donde podemos durante todo este Año
Jubilar ganar las indulgencias, recibir las gracias que la Iglesia nos concede
para este tiempo”.
También señaló que “además,
hemos vivido estos días como una preparación, ya propuesta hace dos años atrás,
para el trienio por los 200 años del natalicio del Beato Mamerto Esquiú. Todos
estos días de la novena hemos venido rezando, pidiendo la intercesión de San José
para que podamos alcanzar la gracia de la canonización de nuestro Beato”.
Respecto de la Cuaresma que estamos
viviendo, rogó “que podamos hacer un camino de conversión, de retorno a Dios,
quien nos da muchas posibilidades para ello… y San José camina a nuestro lado,
fiel custodio de María, fiel custodio de Jesús, también quiere imprimir como
buen artesano, que fue tallando en el corazón de su Hijo Jesús el amor a su fe
judía, hebrea”. Dijo que “San José sigue haciendo lo mismo con nosotros, con la
Iglesia”, por ello pidió “que podamos desde nuestro lugar llevar a su plenitud
la obra de la salvación. Le pidamos esta gracia al Señor por intercesión del
glorioso patriarca San José”.