Celebran los 25 años de la dedicación del tiemplo y consagración del altar
La ceremonia comenzó con las palabras de bienvenida a cargo de Vanesa Garay, y la reseña histórica del templo, responsabilidad de Margarita Romero de Nieva. En las lecturas se destacó el esfuerzo de toda la
comunidad que llevó adelante la construcción de la capilla a través de las comisiones pro-templo. Se agradeció “al Sr. Lucas Nieva, quien no siendo hijo de este pueblo, colaboró cortando y tallando toda la piedra utilizada, y al Padre Adolfo Nieva, quien ayudó para cubrir los gastos de materiales de alto costo”.
También se recordó que “el iniciador de la feliz idea fue un hijo de este pueblo, el arquitecto Juan Félix Álvarez” y mencionaron a otras personas que contribuyeron a medida que el pueblo fue creciendo, entre ellas “mujeres piadosas dispuestas a propagar la fe, como doña Leonor, Clara, Victoria, Rosa, Hilda, Teresita, Mila, Raquel”, entre otras”; además de
“Adrián, Hipólito, Delfor, Belino, Mamerto y otros por los que rogamos que el Señor los tenga en su gloria”, expresaron. Más adelante detallaron los avances que se fueron realizando con el paso de distintos sacerdotes que fueron haciendo su aporte con el acompañamiento de los fieles.
La Santa Misa fue presidida
por el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc, y concelebrada por el párroco de la
zona, Pbro. Sergio Chumbita. Participaron el Intendente de Pomán, Francisco
Gordillio; y los delegados municipales de Rosario de Colana y de Retiro, Fabián
Bazán y Edgardo Nieva, respectivamente.
En su mensaje, Mons. Urbanc hizo referencia a la construcción del templo, que es llamativa, tanto por su forma de estilo alpino, como por el material utilizado, que es un 50 % piedra cortada. Pidió a los fieles que continúen cuidándolo, ya que se trata de la casa donde está Jesús y la Madre, donde uno se reúne para rezar, a pedir y dar gracias.
La celebración eucarística se realizó respetando los protocolos correspondientes debido a la pandemia de Covid-19.
Como parte de las
actividades, se procedió al descubrimiento y bendición de la placa recordatoria
de este acontecimiento; y al finalizar la ceremonia litúrgica, los presentes
compartieron una deliciosa torta.
