Esta mañana se llevó a cabo
la Santa Misa de acción de gracias por el Día del Periodista en la capilla del
Obispado de Catamarca, presidida por el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc, y
concelebrada por el Vicario General de la Diócesis, Pbro. Julio Quiroga del
Pino, que coincidió con la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús.
La ceremonia religiosa contó
con la participación de periodistas y comunicadores de diarios impresos y
digitales, radios y canales de televisión del medio, como también de miembros
de la Pastoral de la Comunicación Social, quienes colmaron la capilla privada
de la sede episcopal.
En un clima fraterno,
participaron activamente de la celebración eucarística, guiando, leyendo las
lecturas, realizando el acto penitencial y la oración de los fieles. Se
elevaron súplicas por la Iglesia, por la Patria, por la Comunidad Diocesana,
por los colegas presentes y ausentes y por quienes están padeciendo alguna
dolencia, también se rogó por aquellos que ya partieron a la Casa del Padre.
En el inicio de su homilía,
el Señor Obispo rescató las palabras del Papa Francisco en oportunidad de su
primer encuentro con los periodistas, luego de asumir el Pontificado, en el que
afirmó: “‘Los acontecimientos eclesiales no son ciertamente más complejos de
los políticos o económicos. Pero tienen una característica de fondo peculiar:
responden a una lógica que no es principalmente la de las categorías, por así
decirlo, mundanas; y precisamente por eso, no son fáciles de interpretar y
comunicar a un público amplio y diversificado. En efecto, aunque es ciertamente
una institución también humana, histórica, con todo lo que ello comporta, la
Iglesia no es de naturaleza política, sino esencialmente espiritual: es el
Pueblo de Dios. El santo Pueblo de Dios que camina hacia el encuentro con
Jesucristo. Únicamente desde esta perspectiva se puede dar plenamente razón de
lo que hace la Iglesia Católica’”.
En otro tramo de su
predicación, Mons. Urbanc dijo que hay que poner los medios de comunicación al
servicio de la dignidad del hombre y que los comunicadores deben “ser personas que
tienden puentes para acercarnos, para encontrarnos, para respetarnos”.
También afirmó que “el espíritu
de Dios, que es un espíritu de verdad, de amor, de armonía, esté impulsando,
sosteniendo su vida, sosteniendo ese trabajo que realizan diariamente”.
Asimismo, consideró que “nos
tenemos que ayudar para poder restablecer, recomponer nuestras relaciones interpersonales;
tenemos que restaurar este tejido social, porque está muy roto”. Y agregó: “Qué
hermoso que en este día del Sagrado Corazón de Jesús, ustedes, los periodistas,
sean realmente aquellos que le devuelvan la esperanza al mundo, porque sin
esperanza no se puede caminar. Ustedes son los grandes protagonistas de la
esperanza, porque la gente de acuerdo a lo que escucha vive, así es el mundo de
hoy. Si ustedes aprovechan las distintas instancias para devolverle la
esperanza a cada ser humano y a la sociedad en su conjunto, siéntanse satisfechos”.
En la parte final de la
celebración, el Obispo bendijo los instrumentos de trabajo de periodistas, camarógrafos
y fotógrafos, que les sirven para realizar su labor diaria. Luego entregó a los
presentes un presente y compartió un brindis fraterno en el salón del Obispado.