Con mucha alegría, la comunidad parroquial de la Santa Cruz, en el norte de la ciudad capital, dio la bienvenida a su nuevo párroco, el Pbro. Humberto Mario Toloza, y despidió emocionada al Pbro. Víctor Hugo Vizcarra, quien desplegó durante nueve años su servicio sacerdotal en la zona. La fiesta eclesial dio inicio con una caravana vehicular, que se desplazó por avenida Los Legisladores hasta la plaza del barrio Eva Perón. Desde este punto, el Padre Humberto junto con el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanč, y el Padre Víctor Hugo Vizcarra, y otros sacerdotes, marcharon en procesión junto con miembros de la parroquia, quienes portaban las imágenes de los Santos Patronos de las distintas comunidades que conforman esa amplia jurisdicción parroquial.
La llegada a la capilla San Benito de Palermo se concretó bajo los acordes de la Banda de Música de la Municipalidad de San Fernando del Valle de Catamarca, dirigida por el maestro José Moltó.
En el atrio del templo fue presentada la parroquia con sus comunidades y patronos: barrio Altos de Choya: San Pantaleón; barrio Eva Perón: San Benito de Palermo; barrios Parque América, 11 de Mayo, 32 Viviendas Norte, Oeste y 80 Viviendas: San Roque González; barrios 26, 32, 48 y 56 Viviendas, Magisterio y Esperanza: San Juan Diego; barrios del Norte de techos verdes, azules y 32 Viviendas Norte: San Expedito; los que se suma el CAPE, con San Fernando.
Inmediatamente se concretó el ingreso al templo, donde se ofició la Santa Misa, presidida por el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanč, y concelebrada por sacerdotes de los diferentes Decanatos que comprenden la Diócesis de Catamarca.
De la ceremonia participaron autoridades municipales, encabezadas por la Secretaria de Educación de la comuna capitalina, Lic. Graciela Marcolli de Zanotti, autoridades de la Policía Provincia que cumplen funciones en ese sector de Capital, familiares y amigos de los Padres Toloza y Vizcarra y fieles en general.
Calurosa bienvenida
En el inicio de la ceremonia, la Sra. María Viviana Díaz dio la bienvenida al Señor Obispo y al nuevo párroco, expresando: “Padre Humberto, esta pequeña parte del pueblo de Dios le desea que pueda vivir entre nosotros como cristiano, sacerdote, padre y amigo de todos. Sabemos que nuestra parroquia es grande y el trabajo es arduo y fatigoso. Sin embargo, estamos dispuestos a seguir creciendo en la fe, en la esperanza, en la caridad y a acompañarlo en este nuevo camino, trabajando pastoralmente unidos. Queremos junto a usted vivir en estado permanente de misión, para ello nos venimos preparando con la oración”.
Tras la lectura del decreto de designación del párroco de la Santa Cruz, a cargo del Secretario Canciller de la Curia Diocesana, Pbro. Juan Néstor Olmos, el pastor diocesano bendijo el agua que fue esparcida entre los presentes.
Durante su homilía, Mons. Urbanč agradeció a las autoridades, sacerdotes y fieles participantes de la celebración eucarística, en el marco de la fiesta de San Policarpo (mártir), a quien confió al nuevo párroco, indicando que éste “caminará con ustedes para que sean testigos, discípulos-misioneros de Jesús”. Asimismo, dijo que “los sacerdotes somos los primeros que tenemos que dar testimonio, y ayudar al pueblo en el camino de la santidad”.
También resaltó que 2011 es el Año de la Vida, “lo que nos lleva a reflexionar sobre la existencia, que no es una vida cualquiera sino una vida de hijos e hijas de Dios”. En este plano exhortó al Padre Humberto a “ser testigo de la vida, que Jesús”, y por ello, su tarea “es anunciarles a ustedes con sus palabras, con su ejemplo, que la vida está en la Cruz”.
Explicó que “el sacerdote dirige a la comunidad, dando su lugar a todos. La Iglesia pone al sacerdote para que haya una bella armonía entre ustedes para a atraer a los que están alejados”.
Al dirigirse a la comunidad, expresó: “Les pido de corazón que acompañen al Padre Humberto, generando verdaderos ámbitos de oración” y viviendo plenamente la Eucaristía.
Luego de la profesión de fe y el juramento de fidelidad, se presentaron las ofrendas simbólicas de cada comunidad, y luego se hizo entrega de los óleos.
En el momento de la paz, el Señor Obispo presentó a cada uno de los sacerdotes asistentes a la celebración y la tarea que desempeñan.
Después de la comunión, el nuevo párroco recibió las llaves de Sagrario, donde se guarda a Jesús Sacramentado.
Emotiva despedida
Antes de finalizar la celebración eucarística, la Sra. Patricia de Santillán, en representación de toda la comunidad, pronunció las palabras de despedida al Padre Vizcarra, destacando sus cualidades de sinceridad, solidaridad, coherencia, honestidad, sencillez y humildad del sacerdote que durante nueve años los acompañó, siendo el primer párroco de ese sector.
A su turno, el Padre Vizcarra dijo: “En esta noche llena de emociones, quiero darle gracias a Dios por haber confiado mi servicio sacerdotal en una nueva parroquia”. Mencionó al Padre Córdoba, “quien trabajó en esta zona junto con los franciscanos y las Hermanas del Carmen”; y agradeció a Mons. Elmer Miani, “quien depositó su confianza para andar nuevos caminos de evangelización”. También manifestó su agradecimiento a todos los miembros de la comunidad parroquial, y al Padre Mario “por la generosidad para responder sí a la Iglesia, en la bellísima tarea de comenzar a ser párroco”.
Por su parte, el flamante párroco dio gracias a Dios por la tarea confiada; a la comunidad por el recibimiento realizado, y los invitó a “seguir caminando juntos lo que Dios ha podido sembrar a través del Padre Viky”.
Como broche de oro de este importante acontecimiento para la Parroquia de la Santa Cruz, los sacerdotes fueron agasajados con un brindis fraterno.