Con ocasión del IV Congreso Misionero
Nacional, que tuvo como sede la Diócesis de Catamarca, el Papa Francisco envió de
regalo un cáliz, que por inconvenientes en la Aduana no llegó a tiempo para ser
presentado los días 17 al 19 de agosto, en que se concretó la convocatoria misionera
nacional, que congregó a Obispos, sacerdotes, religiosas, seminaristas y laicos
de Argentina y otros países de América y Europa.
El cáliz lleva una
inscripción que reza: “Obsequio de su Santidad el Papa Francisco - IV Congreso Misionero
Nacional - 17 al 19 de agosto de 2013 – Catamarca”, y llegó acompañado por una
carta que expresa que se trata de “un regalo como expresión de su presencia
espiritual” y compromete su oración “por los abundantes frutos de santidad y
evangelización del encuentro”, además, pide que recen por él y su servicio a la
Iglesia.
El obsequio fue estrenado durante
las celebraciones eucarísticas de la Asamblea del Clero, que tuvo lugar del 9
al 12 de septiembre.