El jueves 4 de febrero de 2010 quedará grabado en la retina y el corazón de tantos hermanos de Los Altos, que vivieron una verdadera fiesta en la culminación del recorrido de la Imagen auténtica de la Virgen del Valle, por localidades del Este catamarqueño, en el marco de los festejos por el Centenario de Diócesis de Catamarca y del Bicentenario de la Patria. El clima se asoció con una leve llovizna que trajo alivio a las calurosas jornadas previas, y emuló lágrimas de despedida de sus hijos, ya acostumbrados por unos días a su presencia maternal. Una larga caravana de vehículos entre automóviles, camionetas, motos y bicicletas acompañó a la Morenita del Valle desde Bañado de Ovanta, entre el ruido de las bocinas y el silencio de oración, que martizaron el trayecto hasta Los Altos. El intendente César Rafael Olveira junto con miembros del Concejo Deliberante y funcionarios de su gabinete recibieron a la Ilustre Visitante en la ruta a la altura de la capilla de San Cayetano, donde se congregó una gran cantidad de fieles y jinetes, que marcharon delante de la Sagrada Imagen. Desde ese punto, el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc, y los jefes comunales de Los Altos y Bañado de Ovanta, César Olveira y Elpidio Guaraz, respectivamente, junto con peregrinos de a pie hasta la plaza donde se levantó el altar para la celebración de la Santa Misa, presidida por el Señor Obispo.
Interés Municipal
Previamente, se concretó el acto protocolar en cuyo transcurso se leyó el decreto Nº 0011/10, a través del cual se declaró de “Interés Municipal la visita de Nuestra Señora del Valle al Municipio de Los Altos, con motivo del Centenario de la Diócesis de Catamarca”. El mismo instrumento legal declaró “Huésped de Honor al Señor Obispo de Catamarca, Mons. Luis Urbanc”.
El intendente Olveira dirigió un discurso en el que expresó “la inmensa alegría de haber tenido la gracia de recibir a Nuestra Virgen del Valle… Quisiera abrazar espiritualmente a los pobladores de esta localidad como a quienes llegaron de tantos lugares a rendirle homenaje… Ella piensa en nosotros y piensa con amor. Por eso le pido que continúe intercediendo por nosotros como desde hace siglos viene protegiendo a sus hijos”. Luego se sucedieron las palabras de representantes de la comunidad, especialmente del sector educativo. En la ocasión estuvo presente el subsecretario de Seguridad, Dr. Luis Baracat.
De esta forma, una página de amor filial se inscribió en la historia de los departamentos El Alto y Santa Rosa, con este hecho que, por segunda vez en la historia eclesiástica de Catamarca, ocurre con la visita de la Imagen cuatro veces centenaria de la Virgen Valle.
En Bañado de Ovanta
El miércoles 3 febrero, antes de que despuntara el alba, cuando las estrellas se desvanecían en el firmamento y comenzaba lentamente a aparecer tímido el sol anunciando un nuevo día, la Imagen dejó la villa de El Alto, luego de una vigilia, corolario de dos intensas jornadas de reflexión y formación en torno a la Madre del Valle.
Una caravana, encabezada por el párroco de la Inmaculada Concepción de El Alto, Pbro. Héctor Moreno, acompañó a la Madre Morena hasta la localidad de Las Cañas, donde fue recibida por el párroco de Santa Rosa, Pbro. Luis Páez, y los fieles que entonaron cánticos de alabanza a la Madre del Cielo. En el lugar, el Obispo dejó su mensaje e impartió su bendición; y continuó el camino donde se sucedieron los gestos de devoción y de amor a María en la querida advocación del Valle. Durante 46 kilómetros, los devotos se apostaron a la vera del camino para saludarla con aplausos, pañuelos en alto, y flores en mano; enfermos, ancianos, niños, jóvenes, matrimonios; jinetes, motociclistas, todos dejaron sus tareas habituales para esperar a la Madre que salió al encuentro de sus hijos. Casas adornadas, banderas, gallardetes, globos fueron los signos del clima de fiesta que vivieron durante estos días las localidades del Este provincial.
El arribo a Bañado de Ovanta fue lento debido a la gran cantidad de personas que tomaban gracia de la Imagen en la ruta de ingreso a la localidad, donde fue recibida por el intendente Elpidio Guaraz, abanderados y escoltas de escuelas, gauchos y los pobladores de la zona. A escasos metros de la parroquia, mostrando una mayor cercanía de la Madre a sus hijos, la urna fue bajada del móvil y trasladada en andas por efectivos de la Policía de la Provincia, que en todo momento desde su salida de la Catedral Basílica resguardaron el Tesoro más preciado de los catamarqueños. Acto protocolar
En el centro del distrito santarroseño, una gigantesca carpa fue colocada frente al atrio del templo en honor a Santa Rosa de Lima, donde se desarrolló el acto protocolar con la presencia del jefe comunal, el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc; el Delegado Episcopal para el Santuario y Catedral Basílica de Nuestra Señora del Valle; Pbro. Domingo Chaves; el párroco anfitrión, Pbro. Luis Páez, entre otros sacerdotes de la Diócesis. En la ocasión se leyó el decreto a través del cual, la autoridad civil local dio “la bienvenida a Nuestra Madre del Valle y al señor Obispo Diocesano, quienes nos honran con su visita”; y se declaró Huéspedes de Honor e Ilustres Visitantes de la Municipalidad de Santa Rosa, a la Sagrada Imagen de la Virgen del Valle y al Señor Obispo Diocesano Luis Urbanc. Asimismo, el instumento legal “agradece a las autoridades eclesiásticas que acompañan a nuestros ilustres visitantes por su presencia en nuestro departamento”.
Luego se procedió a la entonación de las estrofas del Himno Nacional, en homenaje a la Patria; y se hizo un minuto de silencio en memoria de la señora Edith Maza de Ponce, integrante del Apostolado de la Oración.Por su parte, el párroco local en su mensaje de bienvenida indicó que “nuestra vida está llena de acontecimientos… y para nuestra cultura catamarqueña el acontecimiento es María bajo la advocación del Valle. Ella nos lleva al acontecimiento que es Cristo”. “Como cristianos nos falta un largo camino por recorrer: la conversión pastoral que nos lleva a salir de la mediocridad, del facilismo, del clericalismo y a tomar conciencia como ciudadanos”, enfatizó el sacerdote, exhortando a que “seamos discípulos y misioneros del Evangelio”.
“La recibimos con los brazos abiertos”
En nombre de la comunidad, la señora María Magdalena Argañaraz expresó: “Hoy nuestra Iglesia se viste de júbilo para brindar nuestra sentida y cordial bienvenida a Nuestra Madre del Valle. La recibimos con los brazos abiertos, una fe inquebrantable y el corazón lleno de alegría y amor filial… Esta visita es símbolo de una apertura que no sólo supera fronteras geográficas sino que además remite a una dimensión esencial del hombre, que es la capacidad de abrirse a la Palabra de Dios y a su verdad”.
Por su parte, el intendente Elpidio Guaraz destacó que “la visita de la Virgen del Valle es la más importante que recibimos los santarroseños. Pueden venir gobernadores, presidentes, pero la visita que hoy tenemos acá es la más bella, la más bonita. Es lo mejor que tenemos en Catamarca, porque Ella nos guía y protege”. También agradeció al Señor Obispo su presencia, agregó: “Los santarroseños vamos a demostrarle nuestra fe a la Madre del Valle, en un marco de respeto. Pidamos por los enfermos, los niños, los ancianos, los docentes, las fuerzas de seguridad, por toda la comunidad. Vamos a llegar a sus pies para rezar, para pedirle y agradecerle por todos, para que nos haga más solidarios, yendo hacia el hermano necesitado”. Por último, manifestó que este acontecimiento va a quedar grabado en nuestros corazones. Gracias Virgen del Valle por protegernos”.Seguidamente, dos empleados municipales depositaron a los pies de la Sagrada Imagen una ofrenda floral como homenaje de la familia municipal de Bañado de Ovanta a la Madre Morena del Valle.
La ceremonia oficial finalizó con el descubrimiento de una placa conmemorativa de este gran acontecimiento, concretado en el marco del Centenario Diocesano y de los 200 años de la Patria.
Inmediatamente se celebró la Santa Misa presidida por Mons. Luis Urbanc, y concelebrada por los sacerdotes presentes; tras la cual los fieles devotos desfilaron frente a la Imagen.
Procesión por el pueblo
Por la tarde se llevó a cabo la procesión por las calles de Bañado de Ovanta, deteniéndose frente al hospital para llevar su consuelo maternal a los hermanos enfermos; y antes de finalizar recibió el homenaje de los gauchos. Al término de la marcha procesional, el Señor Obispo presidió la celebración eucarística que estuvo marcada por gestos entrega y emoción cuando la niña Marcela Carolina Olivera, oriunda de la localidad de San Pedro, acercó hasta el altar en su silla de ruedas el vestido que usó para recibir su Primera Comunión.
También el arte estuvo presente con una representación interpretada por niños, con el recitado de Mercedes Quiroga y el bombo de Héctor Valdez; y la actuación de artistas y ballets folclóricos de las distintas comunidades de la zona durante el acto cultural. El clima de fiesta se hizo intenso con los fuegos artificiales que llenaron de brillo y color el cielo santarroseño, durante el homenaje de la municipalidad local.
La Imagen permaneció en el atrio del templo hasta el día siguiente a las 7.30 en que fue trasladada hasta la localidad de Los Altos, donde volvieron a repetirse de manera renovada los gestos de amor y entrega a la Morenita del Valle. Allí se despidió a la Sagrada Imagen, que dejó una impronta en los corazones de sus hijos esteños, en este cumpleaños número 100 de la Iglesia particular de Catamarca y en los 200 de la Patria.