LA
NO VIOLENCIA, RESPONSABILIDAD Y COMPROMISO DE TODOS
Un nuevo femicidio ha
sacudido a nuestra comunidad catamarqueña. Las características del mismo, por
todos conocidas, nos han estremecido y llenado de estupor. Es un hecho doloroso
y traumático por donde se lo mire. Ha suscitado indignación y mucha tristeza.
En primer lugar, queremos expresar nuestras cristianas condolencias a los
padres de Micaela y de Naím. Ninguno de ellos cuidó y educó a sus hijos para
tan tremendo desenlace. Ninguno de ellos se lo habrá imaginado.
Invitamos a todos nuestros
hermanos a la oración y a la reflexión. A la oración pidiendo el eterno
descanso para Micaela y la pronta recuperación de Naím y la justa reparación
por el daño que ha causado. Oración pidiendo consuelo para sus padres, la luz y
la fuerza para enfrentar esta dificilísima situación.
Invitamos a la reflexión
para que sigamos esforzándonos en buscar los mejores medios para educar a
nuestros niños, jóvenes y adultos en el valor de la vida de cada persona, en la
igual dignidad que tienen el varón y la mujer como personas, y a respetar y
estimar las diferencias con que Dios ha querido adornar al ser humano en cuanto
femenino y masculino.
Invitamos a todas las
personas a quitar todo modo de violencia, cuando el mejor medio para resolver
problemas o conflictos entre las personas es el diálogo, acompañado de la
comprensión, la paciencia y la búsqueda de ayuda. Sabemos que la violencia
nunca será el camino. La enseñanza de Jesús y la experiencia nos muestran que la
violencia se vence con la No violencia y la No violencia es decisión que se toma
personalmente. La No violencia es una forma de encaminar la vida en la cual
hemos de ser educados y formados. Pero, ¿podremos lograr esto, si no lo
asumimos como una responsabilidad y un compromiso de todos? Esa responsabilidad
y compromiso comienzan cuando ya desde la niñez se nos enseña y aprendemos a
tratar con respeto y delicadeza, la dignidad de todo ser humano.
En fin, hermanos catamarqueños, “todo lo que es verdadero y noble, todo lo
que es justo y puro, todo lo que haya de virtuoso y merecedor de alabanza, sea
objeto de sus pensamientos” (Filipenses 4, 8).
Y que la Virgen del Valle
nos siga ayudando con su materna intercesión.
EQUIPO
DIOCESANO DE PASTORAL SOCIAL
DIÓCESIS
DE CATAMARCA