Luego de tres días de intenso trabajo y misión en la ciudad cuyana, la
entidad religiosa recalcó la necesidad de refundar la Nación sobre la base de
la honestidad, el esfuerzo, el trabajo, la confianza mutua y el respeto.
Con un fuerte llamado a “refundar
la Nación”, el 15 de octubre, la Acción Católica Argentina clausuró su 29°
Asamblea Federal en el estadio del Club Sportivo Desamparados de San Juan,
donde unas 10.000 personas, provenientes de 49 diócesis de todo el país, entre
ellas Catamarca, con su Obispo, Mons. Luis Urbanc, colmaron sus tribunas.
El reelecto presidente de la
Institución, Rafael Corso, señaló con vehemencia: “Nos urge refundar la Nación
con acuerdos basados en la honestidad, el esfuerzo, el trabajo, la justicia, la
confianza mutua, el respeto, “con un oído en el evangelio y el otro en el
pueblo”, recordando la frase de Mons. Enrique Angelelli.
El dirigente subrayó que “la
Argentina nos necesita a todos, necesita generosidad, inclusión, amor
fraterno”, y aclaró que “con todos y para todos”, frase que se incluía en el
lema del encuentro, “no es un slogan, es una exigencia, un paradigma donde no
hay excluidos ni desechados”.
Así, recordó que luego de haber
protagonizado una gran misión en toda la ciudad, “hemos escuchado las angustias
y alegrías de las personas con quienes nos encontramos en los barrios, en los
hogares, en los hospitales, en las comunidades”.
El acto de clausura contó con la
presencia del gobernador sanjuanino, Sergio Uñac, y del arzobispo de Mendoza y
vicepresidente 2° de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Marcelo
Colombo, quien presidió la misa. También lo hicieron los obispos de San Juan,
San Luis, San Martín, Formosa, San Rafael, Concordia, y el arzobispo emérito de
San Juan, monseñor Alfonso Delgado.
Previo a la celebración
eucarística fueron presentadas oficialmente las nuevas autoridades para el
trienio 2018-2021, cuyo Consejo Nacional seguirá presidido por Corso, e
integrado por Claudia Alejandra Carbajal (Vicepresidenta 1°), Agustín Merlo
(Vicepresidente 2°), María Soledad Taglianetti (Secretaria), Néstor Caruso
(Tesorero); Silvia Monsuárez (Responsable del Equipo de Formación), Silvina Tau
y Jorge Rojas (Responsables de la Comisión de Adultos), María José Correa y
Jorge Arrieta (Responsables de la Comisión de Jóvenes), Mercedes Morales y Jorge
Juárez Véliz (Responsables de la Comisión de Aspirantes), y María Natalia
Lescano y Adrián Álvarez (Responsables de la Comisión de Sectores). En tanto
que el obispo de San Justo, monseñor Eduardo García, fue designado como asesor
general de la Institución, y al Padre Jorge Villafañez como viceasesor general.
En esa misma sintonía, el
gobernador Uñac, que expresó su satisfacción ante la elección de San Juan como
sede del encuentro nacional, destacó el diálogo como la principal herramienta
para superar la crisis: “Creo que lo mejor que podemos hacer entre todos para
solucionar estos problemas, es acudir al diálogo fraterno y a la planificación
y cuando digo diálogo, digo de hablar y de predisponernos a escuchar, de saber
que tenemos algo para decir siempre y también tienen algo para decirnos”.
El mandatario provincial recibió
una placa recordatoria de manos de las autoridades de la institución, como
signo de agradecimiento por “la calidez, contención y servicio”, recibido por
parte de toda la comunidad y la colaboración brindada por su administración.
En tanto, en su homilía, monseñor
Colombo señaló: “Imagino a los distintos niveles de la ACA procurando en sus
líneas de acción discernir los canales adecuados para interactuar con las
diferentes pastorales de la Iglesia que hacen presente el amor de Cristo que
todo lo transforma, la defensa de la vida desde la concepción en el vientre
materno hasta el ocaso natural, no sólo en la asistencia inmediata, sino
también en la promoción integral de todas las personas en su dignidad
inalienable, en su destino trascendente de ser para Dios…”.
En el marco de la celebración
eucarística, al arzobispo de Mendoza hizo entrega a la institución una reliquia
de Wenceslao Pedernera, quien fuera dirigente de la Acción Católica Rural y colaborador
de Mons. Angelelli, de los que el Papa Francisco declaró su martirio, junto a
otros dos sacerdotes. Allí, estuvieron presentes la esposa e hijas del
dirigente asesinado durante la última dictadura militar.
Una vez finalizada la misa, y
tras recibir una bendición apostólica enviada por el Papa Francisco, se
procedió a desconcentrar a los asistentes a esta asamblea, que contó con el
aporte de unos 800 voluntarios, para emprender el regreso a sus hogares.
Mayor información:
www.asamblea.accioncatolica.org.ar.
Mensaje Final
La Acción Católica Argentina
reunida en la ciudad de San Juan, quiere testimoniar al término de su 29
Asamblea Federal y de la 56° Asamblea Nacional su compromiso irrenunciable con
el Evangelio de Jesús.
Porque nos sabemos hijos de Dios
que nos amó primero (1Jn 4, 19) y nos reconocemos como hermanos, nos interpela
la urgencia de testimoniar ese amor que hemos recibido gratuitamente y que
queremos ofrecer con misericordia y verdad.
Hemos escuchado a lo largo de
estos días, las angustias y alegrías de las personas con quienes nos
encontramos en los barrios, en los hogares, en los hospitales, en las
comunidades. Hemos escuchado el sentir de los niños, los jóvenes y los adultos.
Hemos escuchado los gritos de dolor que provienen de las entrañas de los que
sufren la pobreza, la adicción, el abuso, así como aquellos gritos de la tierra
que necesita de nuestra conversión ecológica integral. Hemos escuchado aun, lo
que nos duele escuchar, pero lo hemos hecho respetuosamente porque como dice el
Concilio Vaticano II en la Iglesia “Nada hay de lo verdaderamente humano que no
encuentre eco en su corazón” (GS 1).
Jesús nos ha enseñado una vez
más, que el camino de nuestro ser mujeres y varones creyentes es la búsqueda de
la justicia, la mansedumbre, la humildad, la limpieza del corazón (Mt 5, 1ss)
para abrazar a todos en nuestras coincidencias y respetarnos en nuestras
diferencias, buscando en el dialogo con el mundo que nos toca vivir (ES34) la
superación de lo que nos separa, proponiendo allí el mensaje liberador de
Cristo siendo Iglesia que se hace palabra, coloquio y mensaje. como nos decía
desde hoy, San Pablo VI.
Creemos firmemente que la Vida es
un don sagrado que viene de lo Alto y que por eso debe ser protegida, cuidada,
para que desde su concepción hasta la muerte natural pueda desarrollarse
dignamente, poniendo especial atención en los niños y ancianos como nos ha
encomendado a la Acción Católica, el Papa Francisco.
Deseamos que los jóvenes puedan
descubrir el sentido profundo de la Vida. El proyecto que Dios tiene para cada
uno. Que puedan desarrollar los talentos recibidos, educarse para el amor
responsable, tener horizontes y elegir renovar la historia construyendo el
bien.
Nos apremia la necesidad de una
cultura del encuentro, que como lo hizo el Maestro, nos dé tiempo para detenernos en el “pozo” (Jn
4, 7-10) de tantas situaciones existenciales que necesitan ser sanadas con el
Agua Viva que su Encarnación vino a ofrecer.
Nos urge refundar la Nación con
acuerdos basados en la honestidad, el esfuerzo, el trabajo, la justicia, la
confianza mutua, el respeto, “con un oído en el evangelio y el otro en el
pueblo” (Mons. Angelelli)
La Argentina nos necesita a
todos, necesita generosidad, inclusión, amor fraterno. “Con todos y para todos” no es un eslogan, es
una exigencia, un paradigma donde no hay excluidos ni desechados porque Dios
dador de vida, es Padre justo y misericordioso que nos amó primero.
Que María de Luján, patrona de la
Argentina y Madre de la Acción Católica nos acompañe en la misión.
San Juan, 14 de octubre de 2018