Juan de Dios Gutiérrez, Diego Manzaráz y Martín Melo. |
El viernes 28 de marzo, tres
jóvenes catamarqueños serán ordenados diáconos por el Señor Obispo Diocesano,
Mons. Luis Urbanc. La ceremonia se llevará a cabo en la Catedral Basílica de
Nuestra Señora del Valle, a las 20.00.
Los seminaristas Juan de
Dios Gutiérrez, Carlos Diego Manzaráz y Walter Martín Melo González cursaron
sus estudios en el Seminario Arquidiocesano de Tucumán, y actualmente se
encuentran colaborando en las parroquias de Nuestra Señora de Luján, Chumbicha,
departamento Capayán, y Nuestra Señora de Belén, departamento Belén.
Toda la comunidad está
invitada a compartir esta importante celebración eucarística para acompañar a
estos jóvenes en su camino a la consagración sacerdotal.
Finalizada la Santa Misa, se
compartirá un ágape a la canasta en el Colegio Nuestra Señora del Valle.
¿Qué
es un diácono?
Un diácono (del griego
διακονος, diakonos, «servidor» vía latín diaconus) es un hombre que ha recibido
el primer grado del sacramento del Orden Sagrado por la imposición de las manos
del obispo.
Según el Catecismo de la
Iglesia Católica, los diáconos no son sacerdotes, a pesar de sí pertenecer al
orden sagrado: en el momento de recibir el sacramento del orden sacerdotal en
el grado de diaconado, el fiel pasa a ser clérigo.
Los primeros diáconos fueron
ordenados por los Apóstoles: Hechos 6, 1-6. y fueron 7, el más destacado de
ellos fue el protomártir San Esteban.
Funciones
del diácono
El diácono proclama el
Evangelio y asiste en el Altar, administra los sacramentos del bautismo, del
matrimonio y bendice, lleva el Viático a los enfermos (no pueden administrar la
Unción de los Enfermos, antes llamada Extremaunción). Además, pueden dirigir la
administración de alguna parroquia, se le puede designar una Diaconía y otros
servicios según la necesidad de la Diócesis. En fin, todo lo relacionado con la
misericordia y caridad además de animar a las comunidades que se le
responsabilicen.
Vestiduras
propias del Diácono
Las vestiduras propias del
diácono son la estola puesta al modo diaconal, es decir, cruzada en el cuerpo
desde el hombro izquierdo y unida en el lado derecho, a la altura de la cintura
y sobre ésta la dalmática, vestidura cerrada con amplias mangas, utilizada
sobre todo en las grandes celebraciones y solemnidades.