Misa a 14 años de la muerte de la fundadora de los Focolares
El Movimiento de los
Focolares invita a la celebración eucarística con motivo de cumplirse el décimo
cuarto aniversario del fallecimiento de su fundadora Chiara Lubich. La misma se
llevará a cabo este lunes 14 de marzo, a las 20.00, en la Iglesia Inmaculado
Corazón de María.
¿Quién
fue?
Chiara (Silvia) Lubich nace
en Trento el 22 de enero de 1920. De su consagración a Dios, el 7 de diciembre
de 1943, nace el Movimiento de los Focolares (Obra de María).
La luz del Evangelio vivido
y el «radicalismo del amor» característico del testimonio de Chiara Lubich la
han hecho «apóstol del diálogo» ecuménico, interreligioso y con personas de
convicciones no religiosas.
Ello ha sucedido gracias a
un particular don de Dios reconocido providencial para nuestros tiempos: el
carisma de la unidad, centrado en la oración de Jesús al Padre
«Que todos sea uno» (Cf. Jn.
17,21) y en la comprensión y adhesión al misterio de amor que se encierra en el
grito de abandono de Jesús en la cruz (Cf. Mc. 15,34).
Acogiendo el don de Dios día
tras día y caminando hacia la plenitud de la vida cristiana y la perfección de
la caridad, Chiara Lubich se ha prodigado para que este camino de santidad lo
recorrieran muchos, con una determinación cada vez nueva para ayudar a todos
aquellos que Dios ponía en su camino a «hacerse santos juntos».
Los frutos y los signos
concretos de esta experiencia espiritual y vida de santificación que el
Espíritu obraba en ella se han manifestado en los años de su vida y en el momento
de su muerte, acaecida en Rocca di Papa el 14 de marzo de 2008. Decenas de miles
de personas visitaron la capilla ardiente y participaron en el funeral
celebrado en Roma. Esta significativa presencia, por otra parte, se pone en
continuidad con la incidencia que el carisma de Chiara Lubich ha tenido y tiene
en la Iglesia y en la cultura contemporánea.
Sus restos mortales reposan
en la capilla del Centro del Movimiento de los Focolares en Rocca di Papa
(Roma).
Actualmente es Sierva de
Dios. Compartimos la oración por su beatificación.
ORACIÓN
Eterno Padre, fuente del
Amor,
de toda luz y de todo bien,
te damos gracias
por el carisma de la unidad
que donaste a Chiara
y por el admirable
testimonio que ella,
con la fidelidad a Jesús
Abandonado,
ha dado a la Iglesia y a la
humanidad.
Concédenos, oh Padre, por la
acción del Espíritu Santo
y mediante la Palabra vivida
en el momento presente,
contribuir, según el ejemplo
de Chiara,
con todas las personas de
buena voluntad
a que se realice el deseo de
tu Hijo:
"¡Que todos sean
uno!"
Te pedimos humildemente:
que concedas a nosotros, tus
hijos,
vivir en el amor recíproco y
hacia todos
para gozar de la presencia
del Resucitado mientras,
en comunión con Chiara y por
su intercesión,
nos atrevemos a pedirte, si
Tú lo quieres,
la gracia... (Se expresa la
súplica personal)
por los méritos de Jesús y
para la gloria de la Santísima Trinidad.
Amén.
Con aprobación eclesiástica:
Card. Joao Braz de Aviz
Imagen: Facebook Prensa Iglesia Catamarca