Seis décadas al servicio de la evangelización en tierras chacareras
En los 60 años de labor pastoral, 34 hermanas pasaron por la
comunidad local, siempre dedicadas a la misión y al servicio del pueblo
chacarero.
Luego
de 60 años de labor evangelizadora en la Diócesis de Catamarca, más
precisamente en San Isidro, departamento Valle Viejo, se despiden las Hermanas
Franciscanas Misioneras de la Natividad de Nuestra Señora (1962-2022).
A las
20.00 se celebrará la Santa Misa, en el templo parroquial de San Isidro
Labrador, para acompañar a las Hnas. Lidia Rivera Zárate y Teresita del Carmen
Rengifo Curimozon -ambas de origen peruano- en este momento especial.
Reseña
La
Congregación de las Hermanas Franciscanas Misioneras de la Natividad de Nuestra
Señora (Darderas) tiene sus raíces en el movimiento de espiritualidad y
asistencia caritativa de la llamada “Congregación Seglar de la Natividad de
Nuestra Señora”, fundada en 1599 en el Colegio de Belén de los padres de la
Compañía de Jesús de Barcelona.
Se
dedicaba principalmente al ejercicio de la caridad con los enfermos del
Hospital de la Santa Cruz y de las cárceles. El congregante Francisco Darder
funda en 1731 una causa pía de mujeres, con el fin de atender a las enfermas
del Hospital de la Santa Cruz de Barcelona. Esa causa pía fue transformada en
congregación religiosa en 1896 por la Madre Isabel Ventosa Roig.
En
1926, llegan las primeras hermanas provenientes de España a tierras argentinas,
e inician su labor en distintas provincias del país. Es así como en 1962 se
realiza la fundación de la Comunidad en San Isidro-Valle Viejo, en la propiedad
que la Sra. Erminda Barrera de Antoniette donó al Obispado de Catamarca para la
labor social y benéfica.
Desde
ese entonces pasaron 60 años y la comunidad fiel al carisma de la Congregación
y finalidad de la casa, realizó diversos apostolados y edificado en la propiedad
para el mejor desempeño de la misión:
- En 1962
inician las clases de bordado, corte y confección, como academias. Y, a fines
de ese año, empezaron con clases de dactilografía.
- 1964,
inician clases de Taquigrafía.
- En
1968 se construye la primera parte del edificio actual (ángulo sudeste).
- En 1979
se inaugura la parte nueva de los dormitorios de la comunidad.
- En
1981 se inaugura el pensionado “María Reina”, que era una pensión de niñas de
escasos recursos y muchas sin padres, eran en su mayoría del interior. Ese
pensionado fue famoso y funcionó hasta 2007.
- En
1992 se inaugura la capilla actual.
Valiosa acción pastoral
-
Entre las tareas que desempeñaron las hermanas, básicamente, se destaca el
servicio de enfermería y la colaboración en la asistencia a domicilio a las
personas que estaban inválidas o tenían enfermedades terminales, atendían el
consultorio en la casa y hacían el seguimiento de los pacientes en sus casas.
Cuando aún no existían caminos, ellas iban de noche con su candil por los
senderitos para colocar sueros y socorrer a los enfermos.
- Llevaron
también la contención espiritual a los enfermos impedidos que no podían asistir
a Misa, acercándoles a Jesús Eucaristía en sus casas, geriátricos y sanatorios,
tanto en Valle Viejo, como en la ciudad capital.
-
Además, colaboraron con la parroquia, en el servicio de Sacristía, Secretaría, Catequesis,
Pastoral de la Salud, animación de grupos. En la diócesis, en la Pastoral Vocacional
y Pastoral Misionera.
- Se dedicaron
también a la docencia de los niveles Primario y Secundario.
“No dejar a nadie sin el consuelo de Dios”
Fieles
al don recibido del Dr. Francisco Darder y Madre Isabel Ventosa, 34 hermanas pasaron
por esta comunidad en estos 60 años, entregaron su vida a la misión, al
servicio del pueblo chacarero, recorrieron todos los caminos y senderos para no
dejar a nadie sin el consuelo de Dios, de día, de noche, siempre y
constantemente, respondiendo al carisma de la Congregación, un servicio para
gloria de Dios, en los enfermos y necesitados.
Fotos: facebook Prensa Iglesia Catamarca