Catamarca recibió con júbilo el anuncio de la beatificación de Esquiú en su tierra natal
“Esta hermosa noticia nos va
a ayudar a vivir este tiempo de pandemia con más esperanza, alegría; con un
ideal”, dijo el Obispo Diocesano.
Durante la mañana del jueves 27 de agosto, se conoció oficialmente desde la Santa Sede que la ceremonia de beatificación de Fray Mamerto Esquiú será el 13 de marzo de 2021 en Catamarca.
A las 10 horas, el repiqueteo
de las campanas de la Catedral Basílica, del Templo Franciscano y demás templos
del territorio diocesano, propagó la alegría de esta gran noticia en el Año
Mariano Nacional.
A las 10.30 horas, el Obispo
Diocesano, Mons. Luis Urbanc, realizó el anuncio oficial, en el marco de una
conferencia de prensa realizada en la sede episcopal, acompañado por el
flamante Vicario General, Pbro. Julio Murúa; Fray Pablo Reartes, fraile de la
Comunidad Franciscana local; y el Prof. Mario Vera, historiador y difusor de la
figura de Esquiú.
En el arranque de su contacto
con la prensa, Mons. Urbanc expresó: “Hermanos y devotos de Fray Mamerto
Esquiú, nos ha llegado la buena noticia de la confirmación de la fecha definitiva
establecida por el Santo Padre a través de la Secretaría de Estado. Si Dios
quiere y las circunstancias lo permiten, el 13 de marzo, acá en Catamarca, en lugar
todavía a definir, se va a realizar la ceremonia de beatificación de nuestro
querido comprovinciano Fray Mamerto Esquiú”.
“Esta es una hermosa noticia, que venimos esperando desde hace tiempo y nos va a ayudar a vivir todo este tiempo de pandemia con más esperanza, más alegría; con un ideal; con un propósito”, manifestó el Pastor Diocesano, comentando que por esta “buena noticia, hemos tocado las campanas a las 10 de la mañana”.
Comisión
Diocesana
El Obispo también dijo que “en
julio, he nombrado una Comisión Diocesana específica para ir preparando esta
ceremonia. El Padre Julio Murúa, Vicario General, será mi delegado para
presidir esta comisión multisectorial”. En este sentido indicó que “esta
comisión será la única interlocutora válida para cualquier tipo de preparación
para la celebración”, trabajando coordinadamente con la Comisión Franciscana conformada
con anterioridad.
“Esta Comisión Diocesana tiene un miembro de la Arquidiócesis de Córdoba, puesto por el Arzobispo de Córdoba, porque Fray Mamerto ha sido Obispo de Córdoba. La Arquidiócesis de Córdoba ha cedido sus derechos a la Diócesis de Catamarca porque es donde nació y murió, así que nos queda el gran honor a los catamarqueños de asumir esta responsabilidad de la ceremonia de beatificación”, aseveró.
Asimismo, agradeció a
quienes se esforzaron por esta Causa en el curso de los años, resaltando que
providencialmente “el 13 de marzo del año que viene se van a cumplir ocho años
de la elección del Papa Francisco, y esto nos debe causar una gran alegría”.
Los detalles de la Comisión
Diocesana Esquiú fueron brindados por el Padre Julio Murúa, quien leyó parte
del decreto de designación.
Sus miembros son el Pbro.
Julio Alejandro Murúa (presidente), el R.P. Dante Simón SDB, de la
Arquidiócesis de Córdoba; el Pbro. Carlos Gabriel Robledo, Párroco de San José,
Piedra Blanca; el Pbro. Domingo Martín Chaves, Párroco de San Recreo, Recreo; Fr.
Eduardo Pablo Reartes OFM y el Prof. Mario Daniel Vera.
El sacerdote hizo memoria de
Fray Mario Fuenzalida, fallecido recientemente, quien “ha bregado mucho por
esta Causa”, siendo un gran impulsor de la misma durante muchos años.
“Fray Mamerto tiene un mensaje muy lindo para estos tiempos”
Por su parte, Fray Pablo
Reartes transmitió “la alegría, la felicidad de todos los frailes de la Argentina,
del Provincial Fray Emilio Luis Andrada, del Guardián del convento franciscano
en Catamarca, Fray Eligio Bazán, y todos los frailes, porque se ha hecho
realidad una causa de beatificación muy extensa, que llevó 94 años; y uno de
los frailes que más trabajó en esta causa fue Mario Fuenzalida”.
También mencionó “la alegría
que nos comparte la gente en la calle”, a la vez que agradeció “a Dios que
pronto vamos a tener como beato a nuestro querido Fray Mamerto Esquiú, quien tiene
un mensaje muy lindo para estos tiempos, para los jóvenes, para las familias,
para el cuidado de la Casa Común, para la constitución de las leyes justas, y
todo aquello que tenga que ver con la paz social en este momento tan difícil”.
Finalmente, llamó a que “preparemos
el corazón en este tiempo que nos queda; difundamos las virtudes heroicas de
Fray Mamerto, como fraile, como ciudadano y como patriota”.
“Esquiú
es una figura imprescindible
para
los argentinos del siglo XXI”
A su tiempo, el historiador
Mario Vera recordó “a aquellos hombres y mujeres que durante el siglo XX y esta
parte del siglo XXI han trabajado por difundir la vida, la obra, el pensamiento
y la imagen de nuestro ilustre fraile catamarqueño, y murieron sin tener la
dicha que seguramente vamos a tener nosotros, el 13 de marzo, de participar de
la ceremonia de beatificación.
Además, invitó a que “nos
preparemos, no solo materialmente sino espiritualmente para la ceremonia de
beatificación; a leer a Fray Mamerto Esquiú; a conocer su vida, y si es posible
a imitarlo. Las palabras, el ejemplo y las virtudes de Esquiú tienen todo lo
necesario para que seamos buenos cristianos, buenos ciudadanos; y, sin duda,
esa fogosa palabra de Esquiú puede encender el más puro amor a la Patria.
Porque Fray Mamerto Esquiú fue un hombre
muy importante del siglo XIX, pero es una figura imprescindible para los
argentinos del siglo XXI”.