Joven seminarista fue admitido como candidato al Diaconado y al Presbiterado
Durante la mañana del martes 27 de diciembre, día en
que la Iglesia celebra a San Juan apóstol y evangelista, el obispo diocesano,
Mons. Luis Urbanč, presidió la Santa Misa en la que admitió como candidato a
las sagradas órdenes del Diaconado y del Presbiterado al seminarista
catamarqueño Ramón Leandro Roldán, quien este año concluyó sus estudios en el
Seminario Mayor de Tucumán.
También en esta Eucaristía, Mons. Urbanč dio gracias a
Dios por sus 15 años como obispo de la Diócesis de Catamarca.
La Eucaristía tuvo como escenario la localidad de
Guayamba, departamento El Alto, y fue concelebrada por sacerdotes del clero
catamarqueño llegados de distintos puntos del territorio diocesano, como
también el director espiritual del Seminario Mayor de Tucumán, Pbro. Gerardo
Diéguez; el párroco y el vicario del Inmaculado Corazón de María, Pbros. Amadeo
Tonello y Augusto Salcedo, respectivamente, de la Arquidiócesis de Tucumán.
La capilla de la localidad alteña fue colmada por
familiares, amigos y fieles que acompañaron al joven seminarista en esta nueva
etapa hacia el sacerdocio, destacándose la presencia de un grupo proveniente de
la parroquia Inmaculado Corazón de María de Tucumán, donde el seminarista
realizó su tarea pastoral durante este último tiempo de estudio. Además,
participaron los chicos que culminaron en esta misma jornada el campamento
juvenil de la parroquia Santa Rosa de Lima, del Decanato Este.
En su homilía, el obispo destacó la figura del padre Santiago
Sonzini en el despertar vocacional de Leandro.
Llamó nuevamente a todos a rezar de manera especial por
las vocaciones consagradas, y les habló a los jóvenes sobre la vocación en la
Iglesia.
Asimismo, recordó sus 15 años como pastor de esta
Iglesia particular, que lo acompañó con su oración confiada a Dios por la
fecundidad de su ministerio episcopal.
Seguidamente se realizó el rito de Admisión en el que Ramón
Leandro Roldán fue presentado como candidato para abrazar el Diaconado y el
Presbiterado, quien a su vez expresó el deseo de consagrar su vida al servicio
de Dios y de la Iglesia. Un momento especial, que fue rubricado con un fuerte
aplauso de la asamblea.
Hacia el final de la celebración eucarística, Leandro
agradeció a su familia, amigos, a los sacerdotes y fieles de la parroquia Santa
Rosa de Lima de Capital, a la cual pertenece, y a quienes llegaron desde
Tucumán para acompañarlo en este momento tan importante en su camino hacia el
sacerdocio.
Fotos: facebook Prensa Iglesia Catamarca
