En la noche del martes 7 de
junio, la Cruz de Matará, que peregrina por el país, fue entronizada en la
Catedral Basílica y Santuario de Nuestra Señora del Valle. La ceremonia se
llevó a cabo durante la Santa Misa presidida por el Pbro. Sergio Chumbita,
Delegado Diocesano de Obras Misionales Pontificias, y concelebrada por el Pbro.
José Antonio Díaz, Rector del Santuario Mariano.
En el Año de la Misericordia,
la Cruz de Matará fue entregada a los delegados misioneros de cada una de las diócesis
del país, para que llegue a todo el territorio argentino. En Catamarca, la Cruz
permanecerá en la Catedral hasta el viernes 10 de junio propiciando la
reflexión y la oración comunitaria.
“Como signo de amor más
grande de nuestro Padre para con nosotros, esta Cruz será nuestro diario
recordatorio de que la Misericordia del Padre, es la fuente para nuestra misión”,
expresó el Padre Chumbita.
La Cruz de Matará es un
signo de la evangelización de los pueblos en América y especialmente en el
norte de Argentina; reaviva el llamado a la misión; pone en camino y anima al encuentro con el
hermano, desde lo que somos, desde nuestras raíces, nuestra esencia. Es una
clara muestra de la creatividad y el esfuerzo de los heroicos misioneros, por
incorporar el Evangelio en las culturas nativas de este continente.