03 abril 2010
El Obispo condenó el aborto durante la celebración central del Viernes Santo
Durante la tarde del Viernes Santo, se llevó a cabo en la Catedral Basílica de Nuestra Señora del Valle, la celebración de la Pasión y Muerte de Jesús, presidida por el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanč, quien en su homilía hizo una enfática defensa de la vida, condenando el aborto, al que calificó como “un crimen aberrante”, que hoy existe frente a la indiferencia de la sociedad y favorecido por proyectos legislativos actuales. En consonancia con la voz del Papa Benedicto XVI a nivel mundial, el Pastor Diocesano de Catamarca hizo un parangón entre el evangelio leído, que relata la pasión y muerte de Nuestro Señor, y la realidad del aborto en nuestra patria y en el mundo. Dijo que Jesús es el Inocente por excelencia que fue muerto, al igual que tantos niños inocentes que son asesinados en el vientre de su madre a raíz de la práctica del aborto.
Criticó a los jueces, cuyos fallos contribuyen a truncar la vida de criaturas inocentes, interrumpiendo el plan que Dios tiene pensado para ellas. También cuestionó a los legisladores, que votan leyes contra la vida; como a aquellos profesionales de la salud, convertidos en cómplices del crimen de indefensos. “No impidamos que haya una nueva primavera en el mundo”, dijo Mons. Urbanč.
Continuando con la ceremonia litúrgica, el pueblo de Dios reunido en este día de dolor y de profunda reflexión, elevó súplicas por todos los miembros de la comunidad católica, por los que creen en Dios y no en Jesucristo, por los que no creen y por los gobernantes. A estas plegarias, Mons. Urbanč agregó una petición especial por la conversión de quienes atentan contra la vida.
Luego, los fieles se acercaron a adorar la cruz, y posteriormente a recibir el Sacramento de la Eucaristía, consagrado el Jueves Santo, durante la celebración de la Cena del Señor.