El miércoles 20 de febrero,
se llevó a cabo un retiro espiritual, que contó con la presencia de numerosos
directivos de los distintos colegios confesionales católicos de la Diócesis de
Catamarca. El mismo se desarrolló en la casa de retiros espirituales Emaús y
tuvo el objetivo de animar la tarea en el inicio del nuevo año lectivo.
La prédica estuvo a cargo de
Monseñor Luis Urbanc, Obispo de Catamarca, quien abordó el tema del
"Llamado a la Santidad". Inició
destacando la noble vocación del educador e invitó a los directivos a trabajar “para
que en los colegios seamos y formemos testigos del amor fiel de Dios".
Siguiendo las orientaciones
de la exhortación apostólica "Gaudete et exultate" sobre el llamado a
la santidad en el mundo actual, el Obispo resaltó que la santidad es un regalo
para todos, que es una opción y un proceso en el que cada cristiano se hace
cada vez más libre en este camino a la santidad. Destacó que el Papa Francisco
nos llama a ser santos en lo cotidiano, en lo sencillo, en la cercanía y el
servicio al prójimo con un claro compromiso a favor de la vida.
Reunión
de la Vicaría de Educación
Luego de participar del
retiro para directivos y compartir un almuerzo fraterno, los docentes
responsables de la gestión en los colegios confesionales católicos compartieron
la primera reunión del año de la Vicaría de Educación.
En esta ocasión se contó con
la presencia del Prof. Fabián Herrera, Director de Educación de Gestión Privada
y Municipal, quien informó sobre algunos pormenores respecto de los aranceles,
reconocimientos médicos y uniformes escolares.
Por otro lado, el Pbro.
Oscar Tapia, Vicario Episcopal de Educación, guió el desarrollo de la reunión
que, entre otros temas, trataron sobre la organización del Congreso Mariano
Nacional, un Retiro Ignaciano, el curso sobre ESI y otras cuestiones
administrativas y legales de los colegios.
También se estableció el
calendario de sedes de las reuniones del año y se invitó a los presentes a
seguir orando por la pronto beatificación de Fray Mamerto Esquiú, ya que el
posible milagro avanza a paso firme en los procedimientos correspondientes.