Compartimos
el mensaje de los Obispos del Noroeste Argentino, quienes estuvieron reunidos
en la ciudad de Salta, entre el 4 y de febrero.
ENTRE TODOS CUIDEMOS LA CASA COMÚN
Los
obispos de esta bendecida región del Noroeste Argentino nos hemos reunido en la
ciudad de Salta del 4 al 6 de febrero. Hemos rezado por nuestras Iglesias particulares
y damos gracias a Dios por la vida de nuestro Pueblo. Acompañamos a todas las
comunidades en estos momentos difíciles y queremos plantear, entre muchos,
algunos temas que no están suficientemente visibilizados, pero que nos
preocupan por las consecuencias actuales que comprometen nuestro futuro.
Nos
preocupa la lógica economicista que impone el paradigma tecnocrático, cuya
finalidad es consumir y producir, desplazando a un segundo plano la dignidad de
la persona y la justa distribución de los bienes para el desarrollo humano
integral.
Consideramos
importante resaltar la conexión entre el modelo económico extractivista y el clima, el agua y el modo de vida de las
comunidades. Esto genera nuevas formas de pobreza que expulsan a las personas
de sus propios lugares de origen y las postergan cada día más.
La expansión
indiscriminada de las fronteras agrícolas que incluye el desmonte de grandes extensiones
de bosques nativos, afecta seriamente el conjunto del hábitat. Los suelos se
vuelven vulnerables a la erosión provocada por las lluvias, que traen como consecuencia
las inundaciones cada vez más frecuentes, con los destrozos consabidos.
Estas
no son desgracias que Dios manda, sino males que el hombre hace a la creación y
que traen estos efectos. Sabemos que en toda crisis socio-ambiental los
primeros afectados son los más pobres.
Apoyamos
decididamente a las comunidades que reclaman su derecho a participar en las
decisiones que afectan a la vida personal, familiar y a los recursos naturales
donde se desarrollan la Vida y la Cultura.
Necesitamos
parroquias, escuelas, universidades, comunidades, cuyas prácticas den
testimonio de una cultura que respeta, ama y defiende la Vida, toda vida humana
y toda la creación, porque Vale Toda Vida.
Al
comienzo de este año electoral en nuestra Patria y en el marco del sínodo de la
Amazonía en la Iglesia universal, consideramos que nadie puede ser indiferente ante
el grito de los pobres y de la madre tierra, sobre todo los que tienen la
capacidad de tomar decisiones al respecto.
Con nuestra cercanía de padres y hermanos e
invocando a “María, la Madre que cuidó a
Jesús” y “que ahora cuida con afecto
y dolor materno este mundo herido”, (LS 241) los saludamos cordialmente.
Los
obispos del NOA:
José
María Rossi, obispo de la Santísima Concepción
Vicente
Bokalic, obispo de Santiago del Estero
Enrique
Martínez Óssola, obispo auxiliar de Santiago del Estero
José
Melitón Chávez, obispo de Añatuya
César
Daniel Fernández, obispo de Jujuy
Luis
Urbanč, obispo de Catamarca
Dante
Braida, obispo de La Rioja
Luis
Antonio Scozzina, obispo de Orán
Pedro
Olmedo, obispo prelado de Humahuaca
Félix
Paredes, obispo coadjutor de Humahuaca
José
Demetrio Jiménez, obispo prelado de Cafayate
Mario
Antonio Cargnello, arzobispo de Salta
Carlos
Alberto Sánchez, arzobispo de Tucumán
Luis
Héctor Villalba, cardenal arzobispo emérito de Tucumán