Entre el 8 y el 11 de
febrero se llevó el XIV Encuentro Nacional de Referentes de la Pastoral
Carcelaria, en Villa Allende, provincia de Córdoba. Por la Diócesis de Catamarca
participaron el Delegado Diocesano, oficial sub adjutor Guillermo Gordillo, y el
cabo primero Martín Valdez, ambos del Servicio Penitenciario Provincial.
La convocatoria contó con la
presencia de Mons. Juan Carlos Ares, Obispo Auxiliar de Buenos Aires; Mons. Esteban
María Laxague, Obispo de Viedma; Mons. Adolfo Canecín, Obispo de Goya, y
capellanes de los
Servicios Penitenciarios de las distintas jurisdicciones
eclesiásticas del país.
Las jornadas estuvieron
animadas por el lema “Escucha, Pastoral Carcelaria” y las temáticas giraron en
torno a la apertura del diálogo, la escucha y la lectura bíblica.
El Delegado Diocesano de
Catamarca comentó que “es el segundo año que participamos, fue una experiencia muy
valiosa. Hubo una buena apertura hacia nosotros, porque no están acostumbrados
al trabajo del personal carcelario en la pastoral, ellos son de afuera del
penal, conocen de manera distinta las realidades, no la ven desde adentro. Observaron
que nuestra forma de trabajo da mayor apertura ya que nosotros podemos trabajar
todos los días del año, no solamente una vez a la semana como lo hacen ellos,
nosotros tenemos esa ventaja”.
Asimismo, destacó la importancia
de poder compartir la labor pastoral que desarrollan con gente de todo el país,
que tiene distintas modalidades de trabajo según su propia realidad. “Nosotros
sacamos muchas experiencias de ellos y las volcamos en el trabajo que vamos
haciendo acá. Y ellos se llevan nuestra experiencia con los internos para
aplicarla, buscando un nexo entre el Servicio Penitenciario y la Pastoral Carcelaria
de sus diócesis”.
Vía
Crucis Viviente
Respecto de la tarea en el
Servicio Penitenciario local, Gordillo manifestó que “este año queremos vivir
la Semana Santa con el primer Vía Crucis Viviente dentro de la cárcel. Le estamos
dando forma a ese proyecto inmediato”.
Asimismo, contó que “el año
pasado hicimos un cine debate con la película “La Pasión de Cristo”. Algunos la
habían visto y ahora la vivieron de una manera distinta, los movilizó bastante
la charla que se hizo después. Tratamos de trabajar para que ellos se identifiquen
como el Cristo preso y vean que pueden cambiar y ser mejores personas, eso es
lo que se busca”.