El domingo 9 de junio,
culminaron las fiestas patronales en la parroquia del Espíritu Santo, bajo la
mirada maternal de la Virgen del Madre, quien visitó a esa comunidad de la zona
norte de la ciudad capital, durante los 9 días de preparación para vivir la
celebración de Pentecostés.
En la jornada dominical, el
Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc, administró el Sacramento de la
Confirmación a 136 jóvenes, divididos en dos grupos; una de las celebraciones
eucarísticas fue presidida a la mañana y la otra a la tarde.
Todos los participantes de
la ceremonia de cierre de las festividades se consagraron al Espíritu Santo, y
despidieron a la Santísima Madre del Valle, que los acompañó durante la novena,
en el transcurso de la cual se realizaron distintas actividades.
El sábado 8, se llevó a cabo
la Vigilia de Pentecostés celebrando el cumpleaños de la Iglesia; mientras que
en la noche del viernes 7, luego de la Santa Misa, el Santísimo Sacramento
salió en procesión para bendecir los barrios de la jurisdicción parroquial.
El lema que animó estos días
de fiesta fue “En el Espíritu Santo, discípulos misioneros de Jesús”, y el tema
de reflexión “La espiritualidad de los discípulos misioneros”.
