El domingo 28 de agosto, en
horas de la tarde, se realizó la procesión en honor a Santa Rosa de Lima, como
parte de las fiestas patronales en la parroquia con sede en avenida Virgen del
Valle y calle Rojas, ciudad capital. La misma partió desde plaza Virgen del
Valle con la participación de una delegación del Colegio Cristo Rey, compuesta
por alumnos, docentes y religiosas, las comunidades pastorales de la
jurisdicción parroquial con las imágenes de sus Santos Patronos y fieles
devotos en general.
Al llegar al templo
parroquial las imágenes fueron recibidas al son de la marcha interpretada por
la Banda de Música Municipal. Luego se entonó el Himno Nacional y el
Himno
Provincial, e inmediatamente se ingresó al templo para la celebración de la
Santa Misa, presidida por el párroco, Pbro. Armengol Acevedo, y concelebrada
por los sacerdotes que sirven a comunidades de la jurisdicción parroquial, Antonio
Bulacio y Angel Nieva.
En su breve homilía, el
Padre Acevedo expresó que “la Palabra de Dios que hemos escuchado nos habla de
dos virtudes que hacen a la vida religiosa: la humildad y la caridad. Y su
mensaje es claro: la actitud del verdadero humilde es reconocer que nuestra
palabra no siempre es la más justa ni tampoco la última para cualquier
situación que nos toca vivir”.
Asimismo, manifestó que “la
humildad nos invita al servicio. Ante Dios nos resulta fácil sentirnos
humildes, porque la grandeza de Dios supera infinitamente nuestras limitaciones
y debilidades, pero ante los hombres no siempre es fácil comportarnos con
humildad, porque tendemos a creernos iguales o superiores a los demás”.
Finalmente dijo que “Jesús
nos enseña que hemos de hacer siempre el bien -obrar con amor, con caridad-
buscando no la recompensa y la gratitud de los hombres, sino la recompensa
eterna de Dios. Ésta es la invitación del evangelio que hemos recibido para que
la pongamos en práctica al regresar a nuestras tareas cotidianas”.
Antes de finalizar la Misa
agradeció a todos los fieles que brindaron sus talentos y tiempo para organizar
las diferentes actividades programadas durante la novena, a los sacerdotes que
generosamente colaboran en la tarea pastoral en la parroquia, a la Comisaría
Cuarta y Tránsito Municipal, que cuidaron la seguridad de todos, a las Hermanas
y comunidad educativa del Colegio Cristo Rey, y una mención especial a las
Hermanas de Clausura que enviaron a su Santo Patrono por primera vez para
participar de la procesión.
Como cierre de las fiestas patronales
se compartió un homenaje folclórico de canto y danza en la cancha del Colegio
Cristo Rey.