El martes 31 de octubre, en
la Casa de Retiros Espirituales Emaús, se llevó a cabo una reunión de
sacerdotes delegados de las distintas jurisdicciones eclesiásticas del Noroeste Argentino (NOA), convocada por el
Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc, quien estuvo acompañado por el Vicario
General de la Diócesis, Pbro. Julio Quiroga del Pino; y el Vicario Episcopal de
Pastoral y Rector del Santuario Mariano, Pbro. José Antonio Díaz. Participaron presbíteros
de las diócesis de La Rioja, Santiago del Estero, Añatuya, Concepción, Jujuy,
Orán, las arquidiócesis de Salta y Tucumán, la prelatura de Cafayate y los
anfitriones de Catamarca.
La convocatoria tuvo como
objetivo definir aspectos vinculados con la realización del encuentro de
sacerdotes del NOA, que tendrá lugar el año que viene en nuestra ciudad,
como
parte de las acciones propuestas para vivir el Año Diocesano de la Piedad
Popular, segundo del trienio de preparación para la celebración del Jubileo por
los 400 años del hallazgo de la Imagen de la Virgen del Valle en la Gruta de
Choya, en 2020.
El Padre Díaz manifestó que “el
encuentro de sacerdotes del NOA se realizará los días 10 al 12 de abril, dentro
de las festividades de la Virgen del Valle, y los participantes estarán llegando
el 9 de abril a la tarde”.
En cuanto a las temáticas dijo
que “van a girar en torno a la Espiritualidad Sacerdotal y la Piedad Popular.
Distintas diócesis estarán encargadas de la temática, que tendrá cuatro ejes: cristológico,
mariano, devoción a los santos y algunas prácticas de piedad popular a
considerar. El acto de apertura y la primera disertación general se concretarán
el día 10 a la mañana, y los ejes temáticos se desarrollarán a lo largo de los
días siguientes”.
Por su parte, el Padre
Nicolás José de la Vega, de la Diócesis de La Rioja, párroco de San Antonio de
Padua, en Anillaco, manifestó que “como delegados de los obispos de las
diócesis del NOA, estamos compartiendo esta tarea para unirnos a la maravillosa
celebración por los 400 años de la manifestación y la aparición de la Imagen de
la Virgen del Valle”.
El sacerdote riojano apuntó
que de esta manera buscan profundizar “en esa experiencia profunda del espíritu,
que ya no es simplemente una religiosidad popular sino, como nos dice Aparecida,
un lugar de encuentro, de diálogo, de revelación de Dios, que se convierte en
una verdadera espiritualidad, para acompañar a nuestro pueblo humilde y
sencillo, profundamente devoto de la Virgen del Valle, que a través de gestos,
de actitudes, de expresiones corporales y simbólicas tiene una experiencia y un
encuentro profundo con el Dios de la Vida”.