Durante la tarde del sábado
23 de junio, fieles y devotos de la Virgen del Valle se congregaron en el Paseo
de la Fe para participar del rezo del Santo Rosario, pidiendo por la vida del
niño por nacer y su madre. La tradicional devoción de piedad popular comenzó
con la salida de la bendita Imagen de la Virgen del Valle hasta el atrio, donde
fue saludada con pañuelos, vivas y aplausos.
A medida que transcurrían
las Avemarías de los cinco misterios, resonaban en el corazón
de cada uno de
los presentes las súplicas por la vida en gestación, por la vida de cada
persona, de cada familia, de toda la humanidad.
Alegres canciones aumentaron
el fervor de esta oración sencilla y poderosa elevada a la Madre del Cielo, que
unió a niños, jóvenes, adultos y ancianos en una súplica común.
Al finalizar el Santo
Rosario, los fieles recibieron la bendición del Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc.