El 20 de junio, se celebra el Día
Internacional del Refugiado. La Comisión Episcopal de Migrantes e Itinerantes
quiere tener un gesto de cercanía y fraternidad, con todos aquellos que sufren
esta dramática situación de desarraigo.
Con el Papa Francisco decimos:
“Cada forastero que llama a nuestra puerta es una ocasión de encuentro con
Jesucristo, que se identifica con el extranjero acogido o rechazado en
cualquier época de la historia (cf. Mt 25,35.43)». Y para el forastero, el migrante,
el refugiado, el prófugo y el solicitante de asilo, todas las puertas de la
nueva tierra son también una oportunidad de encuentro con Jesús.” (14 de enero
de 2018)
Jesús nos invita a superar
nuestros miedos para poder salir al encuentro del otro, para acogerlo,
conocerlo y reconocerlo. Es una invitación que brinda la oportunidad de estar
cerca de las personas en situación de refugio, para ver dónde y cómo viven.
Significa comprender sus miedos y sus preocupaciones de cara al futuro.
Significa abrirse a la riqueza de la diversidad sin ideas preconcebidas,
comprender los potenciales y las esperanzas de los recién llegados, así como su
vulnerabilidad y sus temores.
Pedimos a la Virgen María, Madre
de los Migrantes, que los cuide y acompañe, que los proteja y les regale una
vida digna y feliz.
Comisión Episcopal de Migrantes e
Itinerantes
Conferencia Episcopal Argentina
