El 5 de agosto, se cumplen
40 años de la fundación del Monasterio Inmaculada del Valle de la comunidad de
las Monjas Dominicas.
Por este motivo, las
consagradas de vida contemplativa invitan a la Eucaristía de acción de gracias,
que se celebrará el jueves 8 de agosto, Solemnidad de Santo Domingo de Guzmán,
a las 20.00, en la Catedral Basílica y Santuario de Nuestra Señora del Valle.
“Los invitamos a dar gracias
al Señor por los dones recibidos todos estos años, y a que sigan rezando por
nosotras, para que permanezcamos fieles a nuestra vocación contemplativa”, expresan
en la invitación, resaltando que durante estos cuarenta años “la comunidad
acogió en el corazón de su oración las alegrías, los dolores, las esperanzas,
los fracasos, la vida y la muerte de tantos hombres y mujeres que peregrinan en
estas tierras de la Virgen del Valle, y los transformó en una oración confiada
a Dios, Nuestro Padre, quien guía y ama a sus hijos”.
Fundación
de la comunidad
La iniciativa de fundar la
comunidad de Monjas Dominicas contemplativas fue del entonces Obispo de
Catamarca, Monseñor Pedro Alfonso Torres Farías OP, quien solicitó a la
comunidad de Buenos Aires que abriera en la diócesis un monasterio, ya que
hasta ese momento no había ninguno.
El 18 de julio de 1979
llegaron a Catamarca las primeras 6 hermanas: Madre María Jesús Franco (primera
Priora), Sor María Elena Baute, Sor Ana María Medina, Sor María Pilar Aldea, Sor
María Regina Lacamoira y Sor María Teresita Florentín.
El 5 de agosto se concretó la
fundación oficial viviendo temporalmente en una casita acondicionada como
monasterio. La erección canónica, es decir el reconocimiento del Monasterio por
parte de Roma, fue el 7 de noviembre de 1982, para entonces también formaban
parte de la comunidad, Sor Graciela María Cazalá y Sor María Luisa Navarro.
Posteriormente, la comunidad
se trasladó al Monasterio construido como tal en el camino que conduce al dique
El Jumeal en las afueras de la ciudad entre los hermosos cerros.