Momento de las ofrendas. |
El martes 17, en la misa central de las 21.00, dedicada al ámbito legislativo, rindieron su homenaje las autoridades y empleados del Concejo Deliberante de San Fernando del Valle de Catamarca. La misma fue presidida por el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc, y concelebrada por el Rector del Santuario y Catedral Basílica de Nuestra Señora del Valle, Pbro. José Antonio Díaz, y el Vicario Episcopal para la Educación, Pbro. Juan Ramón Cabrera.
Autoridades del Concejo Deliberante capitalino en la misa de homenaje del ámbito legislativo. |
Durante su homilía, el Señor Obispo dijo que “en este tercer día se nos ha propuesto reflexionar sobre ‘la importancia del testimonio de vida, como lenguaje elocuente en la familia y la sociedad’”. En orden a ello indicó que “los textos bíblicos nos presentaron claramente esta cuestión vital para la vida humana: ‘los apóstoles daban testimonio con poder de la resurrección del Señor Jesús y gozaban de gran estima entre el pueblo’; ‘nosotros hablamos de lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto, pero ustedes no aceptan nuestro testimonio’”.
Importante misión
Empleados del Concejo Deliberante portando la urna con la Imagen de la Virgen del Valle, luego de la misa. |
Luego enfatizó: “Cuán importante es esta cuestión para los que tienen la misión delegada, no propia, de legislar velando por el bien común. Por lo mismo, como Jesús, que hablaba de las cosas del cielo porque venía del cielo, así un legislador sólo estará capacitado para interpretar lo adecuado para el bien común si tiene una visión integral y auténtica del ser humano. En esta perspectiva entendemos lo que el Señor decía a su avezado interlocutor Nicodemo: ‘Si no creen cuando les hablo de las cosas de la tierra, ¿cómo creerán si les hablo de las celestiales?’”.
Ya finalizando su predicación, Mons. Urbanc exhortó a que “en esta tercera jornada de honras a nuestra Madre del Valle, reconsideremos con seriedad y compromiso la necesidad que tenemos de creerle a Jesús cuando nos revela los Misterios de la Salvación y, al mismo tiempo, las dificultades que obstaculizan nuestra fe. Le pidamos también que nos ayude a creer firmemente en Jesús y nos asista para que podamos superar todos los escollos que se nos interponen en el camino de la fe. Y, sobre todo, pidámosle permanecer junto con Ella al pie de la Cruz del Señor, para pasar con Él de la muerte a la Vida, de la cobardía a la valentía, de las tinieblas a la luz, del odio al perdón, de la inequidad a la Justicia, de la mentira a la Verdad”.
Durante el ofertorio, los alumbrantes acercaron ofrendas, con elementos que luego serán destinados a los hermanos más necesitados.