El domingo 4, la comunidad
parroquial de la Santa Cruz vivió una jornada en familia, en instalaciones del
Predio Ferial Catamarca, para compartir la primera e histórica visita de la
Virgen del Valle.
Desde las 9.00, las cinco
comunidades que componen la parroquia ubicada en el norte de la ciudad capital
recibieron a la Sagrada Imagen y disfrutaron de un momento de espiritualidad
durante el cual escribieron las intenciones de cada uno que fueron presentadas
a los pies de María y más tarde ofrendadas en la Santa Misa.
Luego hicieron un trabajo en
grupos compuestos por padres y niños separados por sus capillas, en el que
manifestaron los deseos de cada uno para ser felices en sus familias, y que
compartieron en un plenario.
Cerca del mediodía se
celebró la Eucaristía, presidida por el párroco, Pbro. Humberto Toloza, en un ambiente de gran
alegría y fraternidad. En esta primera etapa del Año de la Fe se presentó como
signo de unión el rezo del Credo Niceno Constantinopolitano a la luz de unas
velas que portaron representantes de las cinco comunidades.
Esta jornada de encuentro fue
también de reconciliación, ya que muchos hermanos pudieron recibir el
sacramento de parte del párroco que confesó en casi todo momento.
Luego se compartió el
almuerzo sin que nadie quedara sin integrarse ni poder brindar de su pan a sus
hermanos.
Posteriormente, se realizó
un ensayo de la celebración de la Primera Comunión de los niños de la
catequesis familiar, que tradicionalmente es masiva.
Fue una hermosa jornada, que
compartieron en comunidad junto a la Madre del Valle.