En la Catedral Basílica de
Nuestra Señora se celebrará la misa a las 20.00.
El domingo 17 de mayo,
Fiesta de la Ascensión del Señor, se celebra la 49° Jornada Mundial de las
Comunicaciones 2015, que tiene como lema “Comunicar la familia: ambiente
privilegiado del encuentro en la gratuidad del amor”.
Con este motivo, en la
Diócesis de Catamarca, se celebrará la Santa Misa a las 20.00 en la Catedral
Basílica de Nuestra Señora del Valle, para reflexionar sobre el mensaje del
Papa Francisco para este año, y elevar plegarias al Padre.
Se invita a todos los
comunicadores sociales, periodistas y demás trabajadores de los medios de
comunicación social a participar de esta celebración eucarística, a los pies de
la Madre del Valle y para compartir las palabras del Santo Padre.
El
Mensaje de Francisco
Para esta ocasión, el Santo
Padre emitió un mensaje, dado a conocer en la víspera de la festividad de san
Francisco de Sales, Patrono de los Periodistas, en el que explica que la
comunicación en la familia es “la capacidad de abrazarse, sostenerse,
acompañarse, descifrar las miradas y los silencios, reír y llorar juntos, entre
personas que no se han elegido y que, sin embargo, son tan importantes las unas
para las otras”.
Viendo que el tema de la
familia está en el centro de una profunda reflexión eclesial y de un proceso
sinodal, Francisco eligió la familia como tema para la Jornada Mundial de las
Comunicaciones Sociales.
El Papa recuerda en su
mensaje que “no luchamos para defender el pasado, sino que trabajamos con
paciencia y confianza, en todos los ambientes en que vivimos cotidianamente,
para construir el futuro”. La familia más hermosa, asegura el Papa, es la que
sabe comunicar, partiendo del testimonio, la belleza y la riqueza de la
relación entre hombre y mujer, y entre padres e hijos.
Haciendo referencia al
episodio evangélico de la visita de María a Isabel, el Pontífice explica que
este episodio “muestra ante todo la comunicación como un diálogo que se
entrelaza con el lenguaje del cuerpo”.
Exultar por la alegría del
encuentro es, en cierto sentido, “el arquetipo y el símbolo de cualquier otra
comunicación que aprendemos incluso antes de venir al mundo”, precisa
Francisco. Asimismo, indica que el seno materno, el encuentro entre dos seres a
la vez tan íntimos y tan extraños “es un encuentro lleno de promesas, es
nuestra primera experiencia de comunicación”.
A continuación habla del
seno que es la familia: “Un seno hecho de personas diversas en relación”. Por
eso el Santo Padre recuerda que la familia es el lugar donde se aprende a
convivir en la diferencia, diferencias de géneros y de generaciones, que
comunican antes que nada porque se acogen mutuamente, porque entre ellos existe
un vínculo.”
Francisco también dice que
“nosotros no inventamos las palabras”, sino que “las podemos usar porque las
hemos recibido”. Además, señala que “en la familia se percibe que otros nos
precedieron, y nos pusieron en condiciones de existir y de poder, también
nosotros, generar vida y hacer algo bueno y hermoso”.
Por otro lado, el Papa
observa que la mayor parte de los hombres “aprendió en la familia la dimensión
religiosa de la comunicación”, que en el cristianismo “está impregnada de
amor, el amor de Dios que se nos da y que nosotros ofrecemos a los demás”.
La familia está viva,
señala el Papa, “si respira abriéndose más allá de sí misma”. Las familias
que hacen esto “pueden comunicar su mensaje de vida y de comunión, pueden dar
consuelo y esperanza a las familias más heridas, y hacer crecer la Iglesia
misma, que es familia de familias”, explica el Pontífice.
Por otro lado el Papa habla
de los límites. Y así, afirma que “no existe la familia perfecta, pero no hay
que tener miedo a la imperfección, a la fragilidad, ni siquiera a los
conflictos; hay que aprender a afrontarlos de manera constructiva”. Al
respecto, recuerda que “el perdón es una dinámica de comunicación” y
precisa: “una comunicación que se desgasta, se rompe y que, mediante el
arrepentimiento expresado y acogido, se puede reanudar y acrecentar”. Un niño
que aprende en la familia a escuchar será un constructor de diálogo y
reconciliación en la sociedad, asegura.
El mensaje del Papa hace
referencia, además, a las familias con hijos afectados por una o más
discapacidades. Y explica que “el déficit en el movimiento, los sentidos o el
intelecto supone siempre una tentación de encerrarse; pero puede convertirse,
gracias al amor de los padres, de los hermanos y de otras personas amigas, en
un estímulo para abrirse, compartir, comunicar de modo inclusivo”.
Asimismo indica que la
familia puede ser una escuela de comunicación como bendición. El único modo
para romper la espiral del mal -explica Francisco- es en realidad bendecir en
lugar de maldecir, visitar en vez de rechazar, acoger en lugar de combatir.
Otro tema abordado en el
mensaje son los medios de comunicación modernos. Al respecto el Papa advierte
que pueden “tanto obstaculizar como ayudar a la comunicación en la familia y
entre familias”. Por eso señala que “redescubriendo cotidianamente este centro
vital que es el encuentro, este inicio vivo, sabremos orientar nuestra
relación con las tecnologías, en lugar de ser guiados por ellas”.
El Santo Padre plantea un
desafío: “volver a aprender a narrar, no simplemente a producir y consumir
información”.
Como idea conclusiva,
Francisco señala que la familia “no es un campo en el que se comunican
opiniones, o un terreno en el que se combaten batallas ideológicas, sino un
ambiente en el que se aprende a comunicar en la proximidad”.
Al respecto, el Papa
reflexiona sobre cómo los medios de comunicación tienden en ocasiones a
presentar la familia como si fuera un modelo abstracto que hay que defender o
atacar, “en lugar de una realidad concreta que se ha de vivir” o “como si fuera
una ideología de uno contra la de algún otro, en lugar del espacio donde
todos aprendemos lo que significa comunicar en el amor recibido y entregado”.
De ahí, el Santo Padre señala que “narrar significa más bien comprender que
nuestras vidas están entrelazadas en una trama unitaria, que las voces son
múltiples y que cada una es insustituible”(Aica).