El jueves 15 de marzo, el
Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc, puso en funciones al Pbro. Domingo Chaves como
nuevo párroco de San Roque, en la ciudad de Recreo, departamento La Paz.
La ceremonia se llevó a cabo
en el ingreso al templo, donde se dieron cita fieles de las comunidades que
componen la jurisdicción parroquial, miembros de instituciones eclesiales,
autoridades civiles, encabezadas por el Intendente de Recreo, Prof. Roberto
Herrera, el intendente de Los Altos, Dn. Rafael Olveira, una delegación del
Colegio Parroquial Inmaculada Concepción y las Hermanas del Verbo Divino,
quienes acompañan la labor pastoral en esa zona.
Durante un breve acto
protocolar, se leyó y entregó los decretos declarando Huésped de
Honor al Obispo
y al Padre Domingo Chaves. También hizo lo propio el Concejo Deliberante, tras
lo cual se escucharon las palabras de bienvenida por parte del jefe comunal
local.
La Santa Misa fue presidida
por Mons. Luis Urbanc y concelebrada por el párroco saliente, Pbro. Gustavo
Flores, y sacerdotes del clero diocesano, entre ellos el Vicario para la
Educación, Pbro. Oscar Tapia.
En la oportunidad, se dio
lectura al decreto de designación del nuevo párroco de San Roque, luego de lo
cual fue proclamada la Palabra de Dios.
En su homilía, Mons. Urbanc agradeció
al Padre Gustavo Flores el servicio prestado durante estos seis años en Recreo
y por aceptar la tarea en Bañado de Ovanta, donde fue puesto en funciones el
pasado miércoles 14.
Dirigiéndose a la comunidad
expresó: “Hoy asume al frente de ustedes y con ustedes la tarea de caminar y
construir el Reino, el Padre Domingo, a quien le agradezco su disponibilidad”.
Luego indicó que “la obra
primera del sacerdote es la oración, es el que ora mucho por el pueblo, el que
intercede para que Dios derrame su bendición, su misericordia, toda su
paciencia en el pueblo”. Y continuó: “Otra obra del sacerdote es ser el pastor
que va delante, en medio y detrás de su pueblo, el que guía, cuida, cura, corrige.
Y esto va estrechamente unido a la tarea del maestro, el que instruye, educa, esa
es la otra gran obra del sacerdote”.
Por ello, “el Padre Domingo,
como lo venía haciendo el Padre Gustavo y los otros sacerdotes que han tenido
antes, se va a poner al lado de ustedes, para orar, conducir, pastorear, educar”,
dijo, agregando que “estas tareas las tiene que
realizar el sacerdote, siempre cerca
de su pueblo”.
Posteriormente, el Padre
Domingo Chaves realizó la profesión de fe, el juramento de fidelidad y renovó
las promesas sacerdotales.
En distintos momentos de la
celebración, el nuevo párroco recibió el libro de la Palabra de Dios, que debe
proclamar; los óleos sagrados con los que bautizará y confirmará; el cáliz y la
patena con los que hará presente a Jesús en la Eucaristía; y las llaves del Sagrario
que debe custodiar y adorar.
Antes de la bendición final,
todos los presentes se consagraron a la Virgen del Valle.
Los actos culminaron con las
palabras del flamante párroco, quien agradeció a los fieles de la parroquia donde
antes ejerció su ministerio sacerdotal, y el recibimiento en la nueva
comunidad. También tuvo palabras de gratitud hacia su familia, el Señor Obispo,
sacerdotes, autoridades y los fieles laicos que lo acompañaron en la ceremonia
de asunción.