Como sucede cada
año, los caminos que conducen a San Fernando del Valle de Catamarca, se pueblan
de peregrinos que llegan a los pies de la Morena Virgen del
Valle, luego de recorrer cientos de kilómetros a pie. Son el testimonio vivo
del amor entrañable e incondicional a la Patrona del Valle.
Anoche, finalizado
el homenaje de los jóvenes, Mons. Luis Urbanc saludó a un grupo de ellos,
intercambiando saludos e impartiéndoles la bendición.