En el marco de la
celebración del día de la dedicación del templo Santuario de Nuestra Señora del
Valle, la Iglesia de Catamarca celebró también los 80 años de su Obispo Emérito,
Mons. Elmer Miani, quien presidió la Misa concelebrada por sacerdotes del clero
diocesano y de congregaciones religiosas.
La homilía estuvo a cargo
del Pbro. Salvador Armengol Acevedo, quien comenzó destacando "el gran
sentimiento de alegría con que celebramos el aniversario de la dedicación de
este templo al Señor y, en este marco, los 80 años de Mons. Miani".
"Celebramos en este día
el misterio de la Iglesia representada en el templo. A los templos les llamamos
Iglesia porque en ellos se reúne la Iglesia", agregó y continuó expresando
que "la obra salvadora, Dios la quiere llevar a cabo en la comunidad que
es el Pueblo de Dios. En este contexto celebramos los 80 años de nuestro Obispo
Emérito".
A continuación, el Padre
Acevedo dijo que "esta Iglesia que somos nosotros, que es la Iglesia de
Jesucristo, se apoya en la confesión de fe de Pedro: Tú eres el Cristo, el Hijo
de Dios. Por eso nuestra Iglesia es cristiana, no la comunidad judía del
Antiguo Testamento, sino la que fundó Jesús que es el Cristo, el Ungido del
Padre, nuestro Salvador. Nuestra fe personal es la fe de la Iglesia y nuestro credo
se apoya en el credo de la Iglesia. Por eso a nuestra vida de fe no la podemos
vivir sin la Iglesia, porque la Iglesia nos ha dado la fe, nos alimenta en la
fe y acompaña nuestra fe".
Posteriormente, el sacerdote
comentó que hablando con Mons. Miani de su residencia en Córdoba -donde vive
actualmente- le escuchó decir: 'He ido al recinto que me ofrece la Iglesia y me
siento seguro allí porque es la madre Iglesia la que me cuida', y tocándose el
anillo episcopal le dijo: 'Este es signo de que permanezco indisolublemente
unido a la Iglesia de Catamarca y ésta sigue siendo el sentido de mi vida'. El
Padre Acevedo dijo entonces: "Interpreto que el sentido de su vida quiere
decir el para qué de su vida. Y es el para qué de nuestra vida sacerdotal
servir a la Iglesia, es ser de Jesucristo y para Jesucristo y para la
Iglesia".
"Estamos dándole
gracias al Señor por la vida de Mons. Miani -siguió diciendo el sacerdote en la
homilía- porque parte de su vida la entregó a nuestra Iglesia. Mons. Miani es
de nuestra Iglesia, sigue siendo de nuestra Iglesia. Por eso lleva el anillo y
en este trecho de su vida que el Señor le concederá no sé hasta cuándo, seguirá
siendo para nuestra Iglesia".
En otro momento de su
reflexión, el Padre Acevedo habló de los motivos que los sacerdotes tienen para
agradecer por la vida del Obispo Emérito. Habló de los 25 presbíteros que
recibieron el sacerdocio de Jesús de manos de Mons. Miani y que allí estaban
presentes desde el primogénito, el Padre Juan Olmos, hasta el benjamín, el
Padre Carlos Robledo. "Estamos también los otros que tenemos que dar
gracias a Dios porque cuando estaba ejerciendo el ministerio nos miró con
confianza", dijo.
Finalmente, expresó que
"hay que darle gracias a Dios por el misterio de la Iglesia, por la
comunidad eclesial. La Iglesia es nuestra casa, es la madre, es la barca donde
nos sentimos seguros porque nunca vamos a naufragar. Demos gracias a Dios por
pertenecer a la Iglesia y le pidamos ser fieles, servidores de la Iglesia. Que
el Espíritu Santo nos ayude a reconocer y valorar este don que nos ha dado para
nuestra salvación".
Al concluir la misa, Mons.
Elmer Miani, visiblemente emocionado, agradeció al Obispo Diocesano, Mons. Luis
Urbanc , quien se encuentra realizando su visita pastoral a Tinogasta, quien lo
invitó a venir a Catamarca a celebrar sus 80 años, y las constantes muestras de
cariño que le brindan sacerdotes y laicos en estos días en que se encuentra en
la Diócesis.