El
Obispo y sacerdotes de Gregorio de
Laferrere, a los pies de la Virgen
En la mañana del lunes 29 de
abril, el Obispo de Gregorio de Laferrere, Monseñor Gabriel Bernardo Barba,
junto a más de 20 sacerdotes de esa diócesis de Buenos Aires, rindieron tributo
a la #VirgendelValle, durante la Santa Misa, en el transcurso de la cual
rindieron su homenaje autoridades y trabajadores del ámbito legislativo y judicial de la
provincia, senadores y diputados nacionales y provinciales, Concejos
Deliberantes y Legisladores de Mandato Cumplido; Justicia Federal y Ex
Magistrados; Colegio de Abogados, Escribanos, Procuradores y demás profesiones
afines; y Policía Judicial.
Con esta celebración, el
prelado y los sacerdotes del clero visitante culminaron la semana de formación
y espiritualidad que realizaron en la casa de retiros espirituales Emaús.
En el inicio de la
Eucaristía, Monseñor Barba comentó a la asamblea reunida en torno al altar
mayor del Santuario Mariano, que “hemos terminado la semana del clero, que
hemos realizado aquí, y nos sumamos a estos festejos y a este tiempo especial
preparando el corazón para estas fiestas patronales al pie de la
#VirgendelValle. Y nos unimos con mucha alegría a esta celebración eucarística
junto al Poder Legislativo y al Poder Judicial, que también ponen al pie de la
Virgen todas sus intenciones”.
Durante la homilía, el
asesor de la Pastoral Social de Catamarca, Pbro. Armengol Acevedo, dijo que
“hemos venido a los pies de la Madre para que nos pueda conseguir de Nuestro
Señor lo que estamos necesitando personal y comunitariamente. Hemos venido a
hacer este momento no sólo de oración y súplica sino también de ofrenda; hemos
venido a ofrecerle al Señor parte de la vida de cada uno, a poner en sus manos
las responsabilidades de nuestros trabajos”.
También destacó que “hoy es
un día particular para nuestra Iglesia de
Catamarca, porque estamos celebrando
un nuevo año de la dedicación de esta casa a Dios, lo cual significa que es un
lugar exclusivamente para que se reúna el pueblo de Dios a celebrar, a orar.
Esta casa se la dedicamos al Señor en 1891, nueve días después de la Coronación
de la Virgen, ocurrida el 12 de abril de ese mismo año”.
“Cuando dedicamos y
consagramos un templo tenemos la oportunidad de pensar lo que es el templo, el
culto en nuestra vida religiosa”, expresó, agregando que “en el
templo procuramos
que se una la humanidad y la divinidad, y esto se dio de manera perfecta en el
Hijo de Dios hecho hombre; el mejor y magnífico templo, es la humanidad de
Nuestro Señor Jesucristo, que nos ofrece la salvación”.
En otro tramo de su
reflexión, el sacerdote señaló que “Jesús también ha querido que sus seguidores
tengamos la condición de templo, por eso el día de nuestro bautismo hemos sido
constituidos en un lugar de la presencia de Dios, somos templos de Dios”, por
ello enfatizó que tenemos que estar limpios de pecado y adornado de virtudes.
En el momento de las
ofrendas, los
alumbrantes acercaron a la mesa eucarística alimentos no
perecederos entre otros elementos que serán destinados a la atención de los
hermanos peregrinos.
“Nos
vamos con el corazón lleno”
Al finalizar la celebración,
el Obispo de Laferrere saludó a quienes se dieron cita para honrar a la Virgen
Morenita en la Misa. Y dijo que “hemos sentido claramente el cariño de la
Virgen, gracias especiales de poder estar junto a Ella, y el cariño del pueblo
catamarqueño, que no me asombra porque ya vine otras veces y sé de lo bien que
nos reciben. Nos vamos con el corazón lleno. Vinimos 22 en total, algunos
formándonos, compartiendo una semana del clero”.