El miércoles 2 de noviembre,
la Iglesia conmemoró a los fieles difuntos por quienes elevó su especial
oración en las distintas celebraciones eucarísticas de la jornada.
Durante la mañana, una gran
cantidad de personas participó de la Santa Misa en el cementerio municipal Fray
Mamerto Esquiú, en la ciudad capital, presidida por su capellán, Pbro. Gustavo
Molas, quien en su homilía se refirió a las obras de misericordia y en la necesidad
de que “todo el bien que se puede hacer se debe hacer, no es optativo. Decía el
padre San Alberto Hurtado: ‘Está muy bien no hacer el mal, pero está muy mal no
hacer el bien’. Y si no hacemos el bien estamos cometiendo los pecados de
omisión”, afirmó.
Asimismo, recordó que “hoy
la Iglesia nos recuerda que toda misa se ofrece por los difuntos, por aquellos
que han partido de esta tierra, para que Dios los lleve a la gloria. Y ahí
empiezan a interceder por nosotros.
Nosotros tenemos que hacerlo por Cristo Sacramental, porque como tenemos cuerpo
todavía necesitamos a través del cuerpo de Cristo Sacramental, pan y vino
consagrado, unirnos a El que es quien hace la salvación”.
El Padre Molas manifestó que
“éste no es un día de duelo, al principio, la partida de nuestros seres
queridos duele, pero cuando
uno tiene la convicción de que han pasado a la
gloria, es un día de fiesta. Entonces nos alegramos de haberlos conocido, de
haber sido la oportunidad para que ellos hagan mérito, nos alegramos de que
ellos nos dieran la oportunidad, aunque lloremos por amor. Sobre todo tenemos la
alegría de saber que más temprano que tarde, por la ayuda que ellos darán una
vez en la gloria, también nosotros tendremos abreviado el sufrimiento del
infierno, del purgatorio”.
El
Obispo rezó por los
sacerdotes fallecidos
Frente al Panteón del Clero
catamarqueño, ubicado en el ingreso al cementerio municipal, el Obispo
Diocesano, Mons. Luis Urbanc, rezó por el eterno descanso del alma de los
sacerdotes fallecidos.
Luego dejó una flor como expresión
de agradecimiento por la entrega generosa de sus vidas y el servicio pastoral que
brindaron en la diócesis local.
También, como un gesto de
misericordia en este año del Jubileo propuesto por el Papa Francisco, el Pastor
Diocesano recorrió distintos sectores del campo santo, donde a solicitud de
familiares elevó plegarias por hermanos fallecidos y derramó agua bendita sobre
los lugares donde descansan sus cuerpos mortales.
Por la tarde celebrará la Santa Misa en el departamento
Santa Rosa.